El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó el pasado 13 de noviembre de 2014 con 437 votos a favor, uno en contra y tres abstenciones, reformas a la Ley General de Protección Civil, para promover desde la niñez la cultura de prevención en la materia y brindar atención prioritaria a la población vulnerable.
El documento, enviado al Senado de la República para sus efectos constitucionales, precisa que existe preocupación por que las políticas públicas de protección civil den prioridad a la población vulnerable que se encuentre en mayor riesgo que el promedio, por sus condiciones de precariedad económica y de vivienda, o por ubicación geográfica.
Especifica que en los casos de sismo, la población más vulnerable puede encontrarse en un contexto urbano; en aludes, en la montaña, y en sequías, en el interior del país.
Al fundamentar el dictamen, el presidente de la Comisión de Protección Civil, diputado Francisco Alfonso Durazo Montaño, expresó que la reforma es trascendental porque en prevención o atención de desastres, los planes deben dar prioridad a la población vulnerable o con mayor riesgo.
El diputado Marco Antonio Barba Mariscal manifestó que la reforma es importante para que la población se encuentre verdaderamente preparada, se cumplan los objetivos de la Ley y los gobiernos federal, locales y municipales apliquen todos los programas. “Se coadyuvará a la reducción de las consecuencias que traen los desastres naturales”, sostuvo.
El diputado Raudel López López expuso que el dictamen abona mucho a la prevención, al establecer la enseñanza de una cultura de protección civil desde la niñez. Además, dijo, es trascendental considerar que las políticas públicas deben dar prioridad a toda la población, no sólo a unos cuantos grupos, ya que en toda la nación hay diversos riesgos.
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Arturo Cruz Ramírez, consideró que los niños deben comprender que en materia de protección civil y prevención de desastres y catástrofes existen 53 millones de personas pobres, de los cuales 20 millones viven en extrema pobreza, requieren de atención prioritaria y tienen algún tipo de padecimiento que las hace severamente vulnerables.
La diputada Bárbara Gabriela Romo Fonseca señaló que esta reforma constituye un avance en la promoción de la cultura de protección civil en la niñez. “La estamos preparando ante un estado de emergencia por desastres naturales; seguimos trabajando para fortalecer a nuestras futuras generaciones”.
Gerardo Villanueva Albarrán argumentó que este dictamen responde al interés superior de la niñez; sin embargo, dijo, en este país, independientemente de los desastres naturales, “tenemos a más de la mitad de la población en una situación de franca vulnerabilidad”.
El diputado Manuel Rafael Huerta Ladrón de Guevara mencionó que la Unicef en Costa Rica tiene un programa o una estrategia internacional de reducción de riesgos para los niños, en la cual “jugando se aprende a prevenir desastres”.
José Angelino Caamal Mena, consideró fundamental que desde las primeras etapas de convivencia, los más de 29 millones de mexicanos menores de 12 años adquieran, en un ambiente lúdico y apropiado, los conocimientos que les permitan saber qué hacer y cómo actuar ante riesgos de origen natural o antrópico.
Al hablar a favor del dictamen, el diputado Ricardo Mejía Berdeja expresó que esta reforma generará desde la infancia una visión integral de los problemas de la protección civil. “Se trata de que desde la niñez vayamos inculcando hábitos, protocolos y costumbres”.
