Es momento de recordar algunas sencillas medidas para proteger tu piel del sol y los rayos UV.
Con la finalidad de proteger la salud de la población, la Secretaría de Salud emite medidas preventivas para el cuidado de la piel en esta temporada de calor, ya que durante esta época está más expuesta a sufrir daños como quemaduras solares, cáncer de piel, entre otros.La exposición solar se acumula día a día, y ocurre cada vez que se está bajo el sol. El mantenerse en la sombra es una de las mejores maneras de limitar la exposición a la radiación ultravioleta (UV). No se tiene que evitar completamente la luz solar, sin embargo, demasiada puede ser perjudicial.
Existen algunas medidas que se pueden tomar para limitar la exposición a los rayos UV: Si va a pasar tiempo al aire libre, “¡Póngase, úntese, colóquese y use!” es una frase popular que puede ayudar a recordar algunos de los pasos clave para protegerse contra los rayos UV: ¡Póngase una camisa!, ¡úntese bloqueador solar!, ¡colóquese un sombrero!, ¡use lentes de sol para proteger los ojos y la piel alrededor de éstos!
Una manera de limitar la exposición a la luz ultravioleta es evitar permanecer afuera bajo la luz solar directa por un período prolongado, esto resulta particularmente importante entre las 11 y las 16 horas, cuando la luz ultravioleta es la más intensa.
En la actualidad se fabrican prendas de vestir ligeras y cómodas, que protegen contra la exposición UV, incluso al estar mojadas; estas telas tienden a ser de un tejido más estrecho, y algunas cuentan con un recubrimiento especial que ayuda a absorber los rayos UV.
Otra forma de prevención, es a través de la utilización de bloqueadores solares, los cuales ofrecen protección contra los diferentes tipos de radiación: UVA y UVB. El factor de protección solar (FPS) se refiere al porcentaje de radiación tipo UVB que filtra. Por ejemplo:
- un FPS 15 filtra un 93% de la radiación,
- un FPS 30 filtra un 97% y
- un FPS 50 filtra un 98%
Para que el bloqueador solar sea efectivo se requiere aplicar la cantidad adecuada unos 30 minutos antes de la exposición a la radiación aún en días nublados, y reaplicar cada 2 a 4 horas, dependiendo del sitio de la exposición; esto no exime al paciente de cuidados adicionales para la piel.