El hígado es responsable de múltiples procesos fundamentales para seguir vivos. Es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo, encargado de purificar la sangre, transformar los alimentos en energía y producir bilis para trasladar las grasas en el intestino. Tiene la cualidad de purificarse a sí mismo eliminando toxinas al intestino.
Pero nuestro hígado puede enfermarse si lo exponemos constantemente a la ingesta «de alcohol, exceso de grasas, a sustancias tóxicas, ya sea medicamentos o hierbas, y su mal funcionamiento puede provocar cirrosis, hepatitis, hígado graso o cáncer de hígado”, así lo señaló la doctora Margarita Dehesa, médica internista con subespecialidad en hepatología y miembro de la Fundación Mexicana para la Salud Hepática A.C. (Fundhepa).
“El ciclo de la enfermedad hepática es muy limitado, primero aparece una inflamación del hígado que deriva en una infección aguda, que si no se cuida se puede hacer crónica, se convierte en fibrótico, luego cirrótico y finalmente llega al cáncer de hígado”, advirtió la especialista.
El cáncer de hígado no duele
La doctora Dehesa dijo que el cáncer de hígado no duele, por esta razón la mayoría de los pacientes son diagnosticados en etapas avanzadas y ocasionando 700 mil muertes cada año a nivel mundial, de las cuales 5 mil ocurren en México. Siendo más frecuente entre los hombres que entre las mujeres y con una tasa de sobrevivencia general de 5 años.
Detección
Agregó que entre las principales formas de detección es a través del perfil hepático, llamado fibroscan, una técnica de ultrasonografía que permite detectarlo o procedimientos de imagen como el ultrasonido, la tomografía o las resonancias magnéticas.
El hígado deberá ser suave y blando. Si está duro y con inflamación puede significar que existe un problema. Es importante cuidar y vigilar el hígado pues nuestra vida depende de su buen funcionamiento.
Tratamientos
Al hablar del tratamiento, el doctor Samuel Rivera, oncólogo médico y expresidente de la Sociedad Mexicana de Oncología (SMeO) señaló que el abordaje dependerá de la salud del paciente, es decir, si además del hepatocarcinoma padece alguna otra enfermedad en el hígado o fuera de él que le impida ciertas intervenciones como una cirugía.
Además, hoy existen terapias blanco para este tipo de tumor que permiten sobrevidas por varios años para las personas con el diagnóstico de cáncer hepatocelular.
Recomendaciones para cuidar tu salud hepática
Ante esta realidad, es importante cuidar el hígado con las recomendaciones que a continuación señala la doctora Margarita Dehesa.
1.- Mantener el hígado sano con un estilo de vida saludable.
2.- Hacer ejercicio regularmente.
3.- En caso de sobrepeso o diabetes es importante consultar al médico para que indique las medidas adecuadas para provocar el daño hepático.
4.- Tomar alcohol con moderación.
5.-Beber agua todos los días.
6.-Evitar el consumo excesivo de azúcar.
7.- Evitar el estreñimiento.
8.-Comer frutas y verduras frescos diariamente.
9.-Vacunarte contra la hepatitis B.
10.- Checar anualmente si se padece alguna enfermedad crónica hepática como hígado graso, fibrosis, cirrosis, hepatitis B o C. El chequeo debe incluir la determinación del anticuerpo para la hepatitis C y el virus B.
Finalmente, la doctora Dehesa destacó la importancia de asistir regularmente a revisión médica para identificar algún problema del hígado.