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En México, como en muchas otras partes del mundo, los datos de salud muestran una constante: las mujeres son más propensas a sufrir ciertas infecciones en comparación con los hombres. No se trata de una simple coincidencia, sino de una realidad que tiene explicación en factores biológicos, anatómicos y hormonales.
De acuerdo con la National Library of Medicine (NLM), 4 de cada 10 mujeres desarrollan episodios recurrentes de infecciones que pueden persistir durante meses o, incluso, años.

“La fisiología femenina, con su complejidad única, crea un entorno donde el equilibrio microbiano es fundamental”, señala la Dra. Emma Elizabeth Barla Muñoz, ginecóloga y bióloga de la reproducción. “Cuando este equilibrio se altera —por cambios hormonales, actividad sexual o incluso estrés— se genera el terreno perfecto para que ciertos microorganismos proliferen. Por eso es clave entender el cuerpo femenino y brindarle cuidados específicos”.
Las infecciones más comunes en mujeres
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), las tres infecciones más frecuentes en mujeres son:
- –Infecciones urinarias
- –Infecciones respiratorias
- –Infecciones del sistema reproductivo
Infecciones urinarias: las más recurrentes
El 50% de las mujeres tendrá al menos una infección urinaria a lo largo de su vida, y entre un 25% y 40% puede sufrirlas de forma recurrente, según el estudio Infecciones complicadas del tracto urinario.
Estas infecciones afectan la vejiga (cistitis), la uretra (uretritis) e incluso los riñones (pielonefritis), generando síntomas como ardor al orinar, necesidad urgente de ir al baño, o sangre en la orina.
“La mayoría de mis pacientes llegan al consultorio pensando que tienen una infección vaginal, cuando en realidad es urinaria”, comenta la Dra. Barla. “Hasta el 70% de los casos se diagnostican en consulta ginecológica, ya que muchos síntomas se confunden”.

Infecciones respiratorias: comunes y riesgosas
Desde resfriados hasta bronquitis, las infecciones respiratorias también afectan de forma significativa a las mujeres. Aunque muchas veces son leves, algunas pueden complicarse si no se tratan correctamente.

Estudios recientes revelan que este tipo de infecciones son la principal causa de prescripción de antibióticos, lo que ha contribuido a un problema global: la resistencia bacteriana. Además, se ha identificado que las mujeres presentan más riesgos debido a diferencias hormonales e inmunológicas.
La Dra. Yessica Pérez, médica internista e infectóloga, advierte que “el manejo debe ser individualizado y con un uso racional de antibióticos. El uso de inmunoestimulantes también puede ayudar, ya que se ha demostrado que pueden reducir en un 54% las infecciones respiratorias recurrentes”.
¿Cómo prevenir estas infecciones?
Tanto las urinarias como las respiratorias comparten algo importante: la prevención es clave. Aquí algunas medidas prácticas:
- Para infecciones urinarias:
- -Beber suficiente agua
- -Orinar después de tener relaciones sexuales
- -No aguantar las ganas de orinar
- -Usar ropa interior de algodón y evitar prendas ajustadas
- Para infecciones respiratorias:
- -Mantener al día las vacunas, especialmente en mujeres embarazadas
- -Evitar ambientes contaminados o con humo
- -Mantener una dieta rica en vitamina D y zinc
- -Lavarse las manos con frecuencia
“Una mujer embarazada que se vacuna contra la gripe puede reducir hasta en un 40% las probabilidades de hospitalización”, agrega la Dra. Pérez.

Diagnóstico temprano: tu mejor aliado
Tanto ginecólogos como médicos generales coinciden en que las visitas médicas periódicas son fundamentales. Detectar a tiempo los patrones de recurrencia permite establecer un tratamiento personalizado y evitar complicaciones mayores.
La salud femenina es un tema integral que merece atención continua y consciente. Con información, prevención y cuidado profesional, es posible vivir más tranquila y con menos infecciones.