Para lograr acuerdos con la pareja es importante escuchar y estar dispuestos a negociar, si es necesario, de tal forma que tomen la mejor decisión de mutuo acuerdo.
Formas erróneas de manejar un conflicto
La sumisión es una forma aparente de solucionar o llegar a acuerdos para no lastimar o salir lastimado (a). De igual manera la falsa tolerancia de una conducta o actitud, donde aparentemente no pasa nada, se permite y se disimulan los sentimientos (que luego son resentimientos) o se llega a negociaciones ficticias “vas, pero sólo una hora” y ambos quedan incómodos. El conflicto genera dos posibilidades: la destrucción o el aprendizaje.
No es negociación
* Cuando hay un “rollero” y un callado. Uno expone y el otro acepta.
* Que haya un tercero que dé la razón a uno o lo hagan obligadamente.
* Si alguno de los dos no acepta alternativas y no solucionan nada, sólo pelean.
* Se evita, se niega o se usa la diferencia para atacarse posteriormente.
* Uno de los dos se excluye diciendo “tú decide hoy y yo en la que sigue”.
Si es negociación
* Ambos plantean, se escuchan quedan satisfechos con la solución.
* No hay dominio o sumisión. Se llega a la alternativa más funcional.
* Hay un aprendizaje para ambos. Qué solución les ayuda a crecer como pareja.
* Se integra aquello que puede enriquecer la propuesta: conocerse de otra forma.
* Si el acuerdo tiene una sola dirección y no es confuso: comparten un interés.
* Crecimiento individual y en común a través de enfrentar y resolver el problema.