El masaje es una forma de contacto corporal que produce bienestar psicológico, emocional, físico y energético. Se realiza con movimientos estructurados, suaves pero firmes a través del tacto en el órgano más extenso del cuerpo humano que es la piel.
Es una forma de comunicación profunda entre el profesional del masaje y la persona que lo recibe. Es el placer de sentir tu cuerpo habitado, de dar y recibir sensaciones que enriquecerán tus relación con el prójimo; y lo más importante te permitirán una conexión más profundo con tu SER.
El masaje es una de las artes curativas más antiguas, su historia se remonta 3000 años a.C. ya que aparece en las grandes civilizaciones como China, el Tibet, Japón, Egipto, y la India, entre otras. Uno de los datos más antiguos sobre el masaje terapéutico tiene lugar en Grecia donde lo practicaban en pacientes seniles para prolongar su vida. En la Roma antigua se le practicaba a Julio César un masaje con aceite de oliva para aliviar la neuralgia que padecía. En la Edad Media se usaba con fines estéticos.
A finales del siglo pasado, en Suecia se desarrollaron las grandes escuelas de masaje que influyeron en todo el mundo. De hecho, uno de los más conocidos es el masaje sueco que está inspirado en las técnicas tradicionales de China, Grecia, Egipto y Roma. Fue el sueco Per Henrk quién fusionó en un método racional tales técnicas.
A partir de ahí se han desarrollado diferentes corrientes: el método sueco, el método alemán, el método francés y en España el quiromasaje.
Podemos decir que estas técnicas han sido la base del desarrollo y uso del masaje hasta nuestros días.
Podemos decir que estas técnicas han sido la base del desarrollo y uso del masaje hasta nuestros días.
Los más comunes:
En la actualidad existen diferentes tipos de masaje, mencionaremos algunos importantes:
Masaje sensitivo o relajante:
Se caracteriza por ser un trabajo muscular, circulatorio, cuyo objetivo es proporcionar bienestar y relajación.
Masaje shiatsu:
Método japonés de digito presión en puntos de acupuntura. Su finalidad es mantener un umbral de salud elevado en el organismo y un estado de vitalidad, impidiendo el bloqueo de energía.
Masaje psicocorporal:
Es una técnica de desbloqueo de emociones que se quedaron impresas en el cuerpo causadas por un impacto o trauma.
Reflexoterapia:
Se aplica en las zonas reflejas de los pies pues cada zona corresponde a un órgano del cuerpo, su finalidad es sanar.
Auto masaje o Do-In:
Técnica terapéutica para reordenar y armonizar la energía vital del cuerpo.
Drenaje linfático:
Se aplica en vasos y capilares linfáticos con movimientos suaves, la finalidad es depurar la linfa (líquido rico en grasas que recorre los vasos sanguíneos, parecido a la sangre, pero sólo contiene glóbulos blancos) de impurezas y agentes nocivos.
Método Rolfing:
Manipulación del tejido conjuntivo del cuerpo cuyo objetivo es aumentar la amplitud de movimiento mejorar el equilibrio y la postura.
Quiropráctica:
Es una forma de comunicación profunda entre el profesional del masaje y la persona que lo recibe.
Cualquiera que sea la técnica sentirás sus efectos terapéuticos desde lo superficial a lo profundo del organismo. Sus beneficios se podrán sentir en:
• la circulación sanguínea
• la circulación linfática
• el sistema nervioso
• la piel
• el tejido muscular
• el sistema óseo
• emociones
• el aparato digestivo
• el equilibrio energético
El efecto del masaje nos lleva a un equilibrio físico-emocional o psicológico, energético y espiritual.
T. Patricia Ruiz Rosales.
Psicoterapeuta corporal
Consultorio: Cuicuilco No. 62, Col. Letrán Valle, Deleg. Benito Juárez, México, D. F.
Cel. 044 55 1378 804