El dolor de cabeza (médicamente llamado cefalea) es un trastorno que en la mayoría de las ocasiones cede espontáneamente o con la ayuda de algún analgésico. Cuando estos dolores se intensifican y son constantes por más de 5 episodios, ya se está hablando de migraña crónica.

La Dra. Karina Vélez (Facultad de Medicina de la UPAEP – Puebla) junto con el Dr. Humberto Juárez (Facultad de la UNAM, especialidad Centro Médico Nacional del IMSS), expertos en el manejo de este trastorno, nos explican que las migrañas crónicas se caracterizan por ser de mayor duración e impactar profundamente la calidad de vida de los pacientes que padecen la enfermedad. El algunas ocasiones llegan al grado de generar ausencias laborales, imposibilidad para realizar tareas diarias o incluso derivan en un aislamiento social de quien las padece.

Otro de los problemas que se enfrentan en la migraña crónica es el abuso de analgésicos de parte de los pacientes que recurren a ellos buscando minimizar el dolor.

Una alternativa novedosa que  los médicos nos proporcionan hoy para la disminución de este malestar, es el uso de Botox (un producto biológico formado por un complejo de proteínas, producido por la bacteria Clostridium botulinum).

La mayoría de la gente tiene la creencia de que el Botox únicamente se utiliza de forma estética para reducir las líneas de expresión de la frente, el entrecejo y en general las facciones que se nos forman a lo largo de los años. Sin embargo hoy se sabe por algunas investigaciones que este producto no sólo devuelve la belleza, sino que reduce un trastorno como la migraña que por mucho tiempo se creía que sólo con fármacos podía ser controlado.

Este tratamiento lo aplican por medio de una inyección en los 31 a los 39 puntos de la cabeza y cuello. Con esto se ha demostrado que en los pacientes de migraña les reduce hasta un 50% en el número de días y horas el dolor de cabeza, y disminuye también la intensidad de estos malestares, derivando con ello en mejorar su calidad de vida.

Los especialistas mencionan que esta opción de tratamiento es factible de utilizar cada 3 meses por tiempo indefinido, y sólo puede aplicarse en personas de 20 años en adelante, ya que a partir de dicha edad es cuando somos más propensos a sufrir migrañas crónicas.

Si bien la migraña crónica es un padecimiento del cual hasta la fecha no se ha encontrado una cura definitiva, los expertos coinciden en que sí es posible controlar y disminuir el dolor, pero siempre es recomendable acudir al especialista para la prescripción del tratamiento adecuadamente.

Algunos de los factores que influyen en una migraña crónica son:

• Episodios repetitivos de dolor de cabeza
• Abuso de analgésicos
• Obesidad
• Malos hábitos del sueño
• Estrés