El esguince de tobillo es una lesión de los ligamentos generalmente de la zona externa del tobillo. Se produce al «falsear el pie», lo que produce que los ligamentos (que son como tiras elásticas que unen un hueso con el otro) se estiren demasiado y algunas de sus fibras se rompan. Es la lesión mas frecuente en las actividades deportivas.
Estos ligamentos son los encargados de proveer la estabilidad del tobillo, por lo que es indispensable permitir su adecuada cicatrización.
Así lo explica el Dr. Alberto Cuéllar Avaroma, de la Clínica KingOrtopedia, al mencionar que hay varios grados de esguince dependiendo de si las fibras se alargan, se rompen parcial o totalmente. “En un principio podemos encontrar el tobillo inflamado, con hematoma y con dolor al moverlo o apoyarlo.”
Síntomas y Causas
La intensidad de los síntomas – agregó el especialista – depende de la gravedad de la lesión. Si los esguinces no son manejados de manera oportuna y efectiva tienden a repetirse en múltiples ocasiones volviendo poco estable al tobillo, el cual se lastima con facilidad y el paciente presenta dolor persistente.
De acuerdo con el Dr. Alberto Cuéllar Avaroma, esto causa que el paciente presente un tobillo «débil» que limita sus actividades principalmente deportivas o el caminar sobre superficies irregulares. Alrededor del 5% de los esguinces evolucionan a un tobillo inestable.
“El grado de inestabilidad determina la severidad de los síntomas que acompañan a esta lesión, que pueden ir desde esguinces leves de repetición hasta cuadros de inflamación crónica del tobillo.”
Es importante dar un manejo médico oportuno a este padecimiento para evitar un desgaste de la articulación del tobillo. Dicho manejo dependiendo de la severidad de la patología puede ir desde terapias de rehabilitación, uso de calzado adecuado, hasta estabilización quirúrgica de la articulación”, puntualizó el Dr. Cuéllar.
El especialista comenta que alrededor del 10% de los esguinces evolucionan con síndromes de pinzamiento, que se manifiestan en el paciente como dolor de tobillo y puede ir asociado con hinchazón, rigidez, enrojecimiento y calor en el área involucrada. El dolor es descrito a menudo como un dolor sordo, intenso que se produce al soportar peso y mover el tobillo.
Tratamiento
El tratamiento inicial puede consistir en reposar, ponerse hielo, elevar la pierna e inmovilizarla, pero también puede incluir medicamentos anti-inflamatorios, fisioterapia, y en casos resistentes al tratamiento médico, serán necesarios procedimientos quirúrgicos.
Un ortopedista, especialista en pie y tobillo puede determinar con mayor precisión la causa del dolor de tobillo y las opciones apropiadas de tratamiento. En la mayoría de los casos el diagnóstico se realiza con una exploración médica detallada y puede ser complementada con estudios de imagen.
“Actualmente contamos con técnicas de mínima invasión, como la Artroscopía o cirugías de mínimas incisiones, que nos permiten estabilizar adecuadamente el tobillo con el mayor respeto a los tejidos vecinos, reduciendo así el dolor postquirúrgico así como acortando los tiempos de recuperación y reincorporación a las actividades diarias y deportivas”, finalizó el especialista de KingOrtopedia.
Crédito de imagen Dirima | Fernando Gutiérrez