Durante el seminario “Género y democracia”, la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, diputada Martha Lucía Mícher Camarena, aseguró que las diputadas trabajan para que el Presupuesto Egresos de la Federación (PEF) 2015 contribuya a disminuir la disparidad entre mujeres y hombres.
“No se trata de discriminar al hombre, sino que las mujeres accedan a un ejercicio pleno del derecho a tener y gozar de las mismas oportunidades que los varones”, aclaró en el seminario que impartió la etnóloga, catedrática y ex diputada, Marcela Lagarde y de los Ríos, como parte de las actividades con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, a conmemorarse el 25 de noviembre.“La importancia de llevar a cabo estos seminarios es para que las niñas y las mujeres no sigan siendo discriminadas y tengan el mismo trato”, aseguró la diputada Mícher Camarena.
En su conferencia, Lagarde y de los Ríos, quien como legisladora promovió la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, dijo que de acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México es considerado “el país más violento de América Latina”.
Ante ello, resaltó, es necesario que funcionarios y legisladores detecten las necesidades de las personas, específicamente de niñas y mujeres que son dañadas por su condición de género y “arrasadas en sus derechos humanos”.
Esto es importante, precisó, sobre todo cuando el país se enfrenta cada vez más a situaciones y problemas graves donde los grupos sociales demandan la intervención inmediata del Estado.
La también ex presidenta de la Comisión Especial de Feminicidio de la LIX Legislatura, precisó que el gobierno federal debe planear una política de acción que comprenda las condiciones particulares y peculiares de la población femenina que incluya el lugar donde viven y juegan, y su situación étnica y de trabajo, porque “no sólo nos enfrentamos a una violencia de género, sino de su hábitat”.
La pionera del movimiento feminista en México puntualizó que la importancia del empoderamiento de las niñas y mujeres parte de que la sociedad reconozca sus derechos y el espacio donde estudian, van al cine o laboran; es decir, “que podamos estar en condiciones de que las instituciones exploren ese conjunto de derechos que ya están en la ley, pero que aún no se ejerce en muchos lugares”.
“Hay grandes avances, pero hace falta mucho por hacer, más aún cuando en México continúan sometiéndose a niñas y niños a una esclavitud laboral y del trabajo doméstico y de trata de personas”, añadió.