Una enfermedad silenciosa ya que no hay síntomas en las etapas iniciales, que se caracteriza por disminución de la masa ósea y deformación de los huesos. Entre los factores de riesgo de la osteoporosis se encuentran fumar y aumenta de manera exponencial con la edad.
[/media-credit] Se caracteriza por disminución de la masa ósea y deformación de los huesos
Jesús Felipe González Roldán, director general del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades de la Secretaría de Salud, explica que en México se registran cerca de 75 mil fracturas óseas anuales por osteoporosis y se estima que una de cada 12 mujeres y 1 de cada 20 hombres mayores de 50 años podría tener una fractura de cadera en algún momento de su vida.
La fractura es la mayoría de las veces el primer síntoma de osteoporosis, y su diagnóstico puede ser tardío, cuando más del 30% de la masa ósea se ha perdido, agregó.
A su vez, Esther Lozano, subdirectora de Atención al Envejecimiento del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (CENAPRECE), afirmó que «el diagnóstico tardío se debe a que no hay síntomas en las etapas iniciales de la osteoporosis, y es hasta que las personas tienen un percance cuando se enteran que padecen el problema”.
Los síntomas más frecuentes son las fracturas de las vértebras, la mayoría son asintomáticas y se diagnostican de manera accidental por una radiografía, u otra prueba de imagen que se solicita por otro motivo.
[/media-credit] La fractura es la mayoría de las veces el primer síntoma
Cuando hay síntomas, se siente dolor agudo o crónico en la columna, con una duración de más de seis meses, hay deformidad y disminución de la talla.
Para diagnosticar este padecimiento se requiere identificar la densidad mineral ósea, que permite medir la pérdida de hueso que el paciente ha tenido.
Puntualizó que los medicamentos para tratar la osteoporosis pueden ayudar a prevenir fracturas, pero la deformación de huesos que se ha presentado es irreversible.
Recomendó llevar una dieta rica en calcio, que se encuentra principalmente en la leche y derivados lácteos como el queso y el yogur. Los niños deben tomar como mínimo 800 miligramos de calcio al día, los adultos mil miligramos al día, y las mujeres embarazadas mil 200.
