“En México, 50 de cada 100 mil habitantes pueden padecer Parkinson, que es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente en el mundo, y se estima que 4.6 millones de personas mayores de 50 años la padecen”, advirtió la neuróloga y sub-especialista en movimientos anormales, Elisa Otero.
La integrante del Consejo Mexicano de Neurología detalló además que para el año 2030, el número de pacientes con Parkinson se podría duplicar, ante lo cual, “debemos trabajar en conjunto médicos, familia y sociedad para lograr el mayor bienestar de los pacientes para que tengan una mejor calidad de vida”.La Doctora Otero Cerdeira detalló –en el marco del Día Mundial del Parkinson que se conmemora el 11 de abril–, que los pacientes enfrentan un desgaste emocional pero también un severo impacto en los ámbitos laboral, social y funcional.
La también integrante de la Asociación Mexicana de Trastornos del Movimiento, detalló que “la enfermedad de Parkinson es una alteración neurológica caracterizada por la pérdida prematura de algunas células del cerebro muy especializadas y tiene un curso crónico y progresivo.
“El padecimiento suele comenzar entre los 50 y 65 años de edad y a nivel mundial se estima que el 2% de la población padece la enfermedad, aunque existen casos en que se manifiesta antes de los 40 años, conocidos como Parkinson de inicio temprano o aquel que se manifiesta antes de los 20 años, conocido como Parkinson juvenil [i]”, expuso.
La especialista comentó que los síntomas del Parkinson son de dos tipos: motores o no motores y, generalmente –dijo–, el padecimiento comienza con síntomas no motores en etapa preclínica; es decir, cuando aún no se ha realizado diagnóstico alguno.
De acuerdo con la experta, se debe estar alerta ante la presencia de alteraciones de sueño, problemas de olfato o estreñimiento, entre otros. Posteriormente, en la etapa llamada “manifiesta” presentan síntomas motores como lentitud, temblor, rigidez, inestabilidad y problemas para caminar.
Durante el encuentro la especialista aclaró que “no es una enfermedad que se contagia”, y explicó que “no se cura ni es un tipo de locura, tampoco es una sentencia de muerte y no la ocasiona un disgusto”.
Destacó además que “es un padecimiento que necesita ser diagnosticado oportunamente, debe contar con la guía de un neurólogo, además de un tratamiento multidisciplinario que incluya terapia médica, rehabilitación física y grupos de apoyo porque de esa manera se puede controlar eficazmente”.
Respecto de las causas de la enfermedad de Parkinson, la doctora Otero refirió que para el desarrollo de la enfermedad “existen factores genéticos que entran en juego con factores ambientales aún no bien identificados”, y expuso además que “el envejecimiento prematuro ya no se acepta como un modelo fisiopatológico; sin embargo –agregó- , los síntomas aparecen cuando se produce una disminución en la secreción de dopamina y otros neurotransmisores relacionados; se trata de un desequilibrio químico que debe ser diagnosticado y tratado oportunamente, para brindar al paciente una buena calidad de vida”, concluyó.
Sitios de interés
- Consejo Mexicano de Neurología http://www.consejomexicanodeneurologia.org/
Referencias
- En Español – Parkinson’s Disease Foundation (PDF) http://www.pdf.org/en/espa_ol
- Parkinson’s disease Introduction http://www.nhs.uk/Conditions/Parkinsons-disease/Pages/Introduction.aspx