La presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, diputada Laura Plascencia Pacheco, propone reformas a la Constitución para que el Ejecutivo federal tenga la facultad y obligación de nombrar y remover su gabinete presidencial bajo el principio de paridad de género, lo que significaría la integración cuantitativa igualitaria entre mujeres y hombres en los funcionarios de Estado.
La legisladora aseguró que a pesar de los avances logrados con la reforma político-electoral del 2014, que garantizó que Congresos federal y locales se integraran bajo el principio de paridad, “las mujeres seguimos relegadas de los espacios de la toma de decisiones y continuamos sin ocupar puestos públicos en un país donde somos el 50% de su población”.La iniciativa refiere la conformación del gabinete presidencial en términos igualitarios de cargos para mujeres y hombres, constituyendo éste uno de los principales elementos del Poder Ejecutivo; “es necesario que responda a las necesidades de la democracia del país, ya que los puestos públicos, sobre todo, los de mayor responsabilidad, siguen ocupados mayoritariamente por varones”, afirmó.
Plascencia Pacheco reconoció avances importantes en la materia, pero destacó que pocas mujeres ocupan puestos públicos en el gabinete. Lo mismo ocurre en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), donde laboran como ministros 9 hombres y sólo 2 mujeres.
Comentó que nuestra Constitución reconoce la igualdad para el ejercicio de los derechos político-electorales y la certeza, la legalidad, la independencia, la imparcialidad, la máxima publicidad y la objetividad, como principios rectores del ejercicio de la función electoral.
Estos principios y mandatos, tanto nacionales como internacionales, no deben ser sólo enunciativos, implicaría reproducir esquemas de subordinación de las mujeres. “Debemos encontrar su factibilidad en la adecuación normativa, a fin de que los espacios de toma de decisiones públicas sean integrados bajo el principio de paridad de género (50/50)”.
Dada la importancia de las instancias de gobierno, y para garantizar que las mujeres estemos representadas paritariamente en los referidos asuntos político-administrativos del país, es indispensable reformar nuestra Carta Magna para que las Secretarias de Estado se integren con el principio de paridad de género y, de esta forma, las mujeres podamos ocupar estos espacios históricamente masculinizados, precisó.
La reforma daría cumplimiento a los diversos compromisos y convenciones internacionales en materia de paridad a los que el Estado mexicano se ha sujetado tales como: la Norma Marco para la Democracia Paritaria, la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) y la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Convención de Belem do Pará).
“Estoy convencida de que al integrar paritariamente el gabinete presidencial se representarán integralmente los intereses de sus habitantes, por lo que su eficacia administrativa y operación política se verá favorecida al velar por los intereses de la igualdad de género”, agregó.