Las infecciones de sitio quirúrgico tienen en México una incidencia de entre 9 y 46%. Por lo que es fundamental trabajar en equipo, pacientes, personal sanitario, instituciones públicas y privadas para lograr reducir el riesgo de infección.
Es fundamental reconocer la importancia de reducir el riesgo de infección utilizando la sutura adecuada que ayude al cierre de la herida y proteja de la presencia de bacterias.
Las infecciones de sitio quirúrgico (ISQ) son la complicación más común después de cualquier cirugía; comprometen la incisión, tejidos y órganos o cavidades manipuladas, y pueden ser detectadas hasta 30 días después de realizada la cirugía. Se ha identificado que su incidencia fluctúa entre 9 y 46%, dependiendo del tipo de institución de salud y nivel socioeconómico.
De acuerdo a una publicación de la Asociación Mexicana de Cirugía General A.C., los pacientes que la presentan tienen 5 veces más probabilidades de ser readmitidos en el hospital y entre 2 y 11 veces más probabilidades de morir que los pacientes que no la padecen [1],[2],[3].
Las ISQ aumentan los costos de la atención de la salud, ya que:
- Implican estancias prolongadas en el hospital.
- Mayor consumo de recursos hospitalarios (antibióticos, estudios, consultas y otros procedimientos).
- Incremento en la morbi-mortalidad de los pacientes.
Además, existen costos indirectos asociados a las ISQ que incrementan la carga económica asociada; entre ellos están la pérdida de productividad, el ausentismo laboral y las incapacidades de los pacientes que las desarrollan [5],[6].
Se informó que de acuerdo con toda la información, y basado en fuentes públicas, se estima que en México una ISQ le cuesta aproximadamente $74,500 MXN a un hospital público de tercer nivel en 2017, pudiendo este número aumentar si el paciente desarrolla otras complicaciones [7].
En otros países, las ISQ representan también altos costos: en Estados Unidos, estas cuestan entre $3,000 y $29,000 dólares por evento [8] , mientras que en Inglaterra cada ISQ implica un costo adicional de entre 4,600 y 6,700 libras por paciente [9].
Con base en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de las Directrices Mundiales para la Prevención de la Infección del Sitio Quirúrgico [10], se sugiere el uso de suturas recubiertas con triclosán (SRT) como una forma de reducir el riesgo de infecciones postoperatorias, independientemente del tipo de cirugía que se practique.
Asimismo, tanto los Centros de Control de Enfermedades de Estados Unidos [11] (CDC, por sus siglas en inglés), como el Colegio Americano de Cirujanos y la Sociedad de Infecciones Quirúrgicas [12] recomiendan el uso de suturas recubiertas con triclosán para prevenir ISQ. Desde la perspectiva económica, un estudio publicado en 2014 encontró que la utilización de SRT en cirugías reduce el costo de la atención de la salud al disminuir el riesgo de desarrollar ISQ [13].
En el marco del 130 aniversario de las suturas ETHICON en México, nos destacan que fundamental reconocer la importancia de reducir el riesgo de infección utilizando la sutura adecuada que ayude al cierre de la herida y proteja de la presencia de bacterias.
Actualmente, la evolución e innovación en dispositivos médicos permite que haya una gran variedad de suturas con diseños específicos para cada tipo de procedimiento, al alcance de la comunidad médica y de los pacientes sometidos a cirugía.
«Una sutura adecuada no sólo elimina algunas de las dificultades encontradas antes en el cierre de la herida, sino que también disminuyen el potencial de infección postoperatoria, el tiempo de internación o readmisión, trayendo beneficios a la salud del paciente”, puntualizó la Dra. Isabel Villegas, Pediatra Infectóloga.
https://youtu.be/VhFgDH5O9aU
Sitios de interés
- ETHICON http://www.ethicon.com/
Referencias
- Dr. Cerda Juan; Dr. Torres Roberto; Dr. Valdéz Juan Pablo; Dr. Escudero Ángel; Dra. Guzmán Rosa María; Dr. Galindo Antonio. (2014). Prevención y Manejo de Infección de Heridas Quirúrgicas, P.7. 23/11/2017, de Asociación de Cirugía General A.C. Sitio web: https://amcg.org.mx/images/guiasclinicas/infecciones_de_heridas_quirurgicas_infectadas.pdf
- Dr. Cerda Juan; Dr. Torres Roberto; Dr. Valdéz Juan Pablo; Dr. Escudero Ángel; Dra. Guzmán Rosa María; Dr. Galindo Antonio. (2014). Prevención y Manejo de Infección de Heridas Quirúrgicas, P.7. 23/11/2017, de Asociación de Cirugía General A.C. Sitio web: https://amcg.org.mx/images/guiasclinicas/infecciones_de_heridas_quirurgicas_infectadas.pdf
- Vilar Compte D, García Pineda B, Sandoval Hernández S & Castillejos A. Infecciones de sitio quirúrgico. De la patogénesis a la prevención. Enf Inf Microbiol 2008;28(1):24-34.
- Anderson DJ, Kaye KS, Classen D, et al. Strategies to prevent surgical site infections in acute care hospitals. Infect Control Hosp Epidemiol 2008;29(S1):S51-S61.
- Vilar Compte D, García Pineda B, Sandoval Hernández S & Castillejos A. Infecciones de sitio quirúrgico. De la patogénesis a la prevención. Enf Inf Microbiol 2008;28(1):24-34.
- Anderson DJ, Kaye KS, Classen D, et al. Strategies to prevent surgical site infections in acute care hospitals. Infect Control Hosp Epidemiol 2008;29(S1):S51-S61.
- Estimación interna, con base en los Grupos Relacionados con el Diagnóstico IMSS. Valor ajustado por inflación a octubre de 2017 de acuerdo con la calculadora de inflación de INEGI (disponible en www.inegi.org.mx; última visita: 24 de noviembre de 2017).
*Los Grupos Relacionados para el Diagnóstico (GRD) se definen como instrumentos para clasificar a los pacientes de acuerdo con su diagnóstico. Los procedimientos hospitalarios que se incluyen en un mismo grupo utilizan insumos similares; estos instrumentos permiten calcular los costos de atención e identificar los productos hospitalarios involucrados y, por lo mismo, facilitan la comparación del desempeño entre unidades de salud relativamente homogéneas - Anderson DJ, Kaye KS, Classen D, et al. Strategies to prevent surgical site infections in acute care hospitals. Infect Control Hosp Epidemiol 2008;29(S1):S51-S61.
- Jenks PJ, Laurent M, McQuarry S & Watkins R. Clinical and economic burden of surgical site infection (SSI) and predicted financial consequences of elimination of SSI from an English hospital. Journal of Hospital Infection 2014;86:24-33.
- Organización Mundial de la Salud (OMS): http://www.who.int/mediacentre/news/releases/2016/recommendations-surgical-infections/es/
- Berríos-Torres SI, Umscheid CA, Bratzler DW, et al. Centers for Disease Control and Prevention Guideline for the Prevention of Surgical Site Infection, 2017. JAMA Surg 2017; doi: 10.1001/jamasurg.2017.0904
- Ban KA, Minei JP, Laronga C, et al. American College of Surgeons and Surgical Infection Society: surgical site infection guidelines, 2016 update. Journal of the American College of Surgeons 2016; doi: 10.1016/j.jamcollsurg.2016.10.029
- Singh A, Bartsch SM, Muder RR & Lee BY. An economic model: value of antimicrobial-coated sutures to society, hospitals, and third-party payers in preventing abdominal surgical site infections. Infect Control Hosp Epidemiol 2014;35(8):1013-20.
- Materiales de Sutura, Antecedentes históricos. Dr. Almada Mario, Asistente Dpto. Básico de Cirugía; Dr. Fernández Gonzálo. Sitio web: http://www.fmed.edu.uy/sites/www.dbc.fmed.edu.uy/files/2.%20Materiales%20de%20sutura%20-%20M.%20Almada.pdf