El kick boxing es un arte deportivo dinámico que combina las técnicas de lucha o combate del boxeo con otras artes marciales. Su nombre significa “boxeo con patada”.

Nació en Japón en 1969 de la unión del karate que es de origen japonés, con el muay thai, que es el boxeo tailandés.

Ha ido evolucionando hasta transformarse en un programa de acondicionamiento físico en el cual se realiza una actividad aeróbica superior; razón por la cual muchas mujeres lo están practicando, pues es una excelente alternativa para las que no pueden bajar de peso y moldear su cuerpo al mismo tiempo.

Una sesión de kick boxing empieza con trote frontal y lateral con movimientos de cintura como calentamiento, seguido con saltos en la cuerda y varios ejercicios aeróbicos para un buen entrenamiento cardiaco.
Después viene una sección de golpes y patadas, seguida de ejercicios de golpes en la pera o el saco. Trabajo de sombra: con técnicas de bloqueo, golpes de puño, golpes de pie, y trabajo con el compañero. Para terminar, generalmente se hacen abdominales y flexiones de brazos y piernas.

Para obtener buenos resultados practícalo dos veces por semana durante una hora. Usa ropa cómoda, no ajustada, que puedas empapar de sudor.

Si decides a ingresar a un gimnasio busca el que te ofrezca un buen programa, con instructores certificados.

Rutina saludable

Te recomendamos una rutina a base de ejercicios aeróbicos utilizados en el kick boxing que podrás realizar en casa. Y si piensas que no puedes practicarlo por falta de tiempo, te sugerimos algunas variaciones que podrás ejecutar en las actividades cotidianas.

1Golpes de patada

De pie, frente al espejo lanza patadas al frente y hacia los lados alternando ambas piernas. Una pierna permanece en el suelo, mientras levantas la otra. Mantén la patada baja para no lastimarte. Asegúrate de gritar fuerte al lanzar el golpe para liberar todo el estrés.

Variación: Sacude tus tapetes y alfombras ejecutando patadas.

2 Golpes de puño

De pie, frente al espejo con las manos en puño, lanza golpes alternando ambas manos. Gira, retrocede, avanza, y si te es posible brinca con saltitos cortos, para coordinar tus movimientos. Sigue gritando al lanzar golpes, para liberar la tensión y el estrés.

Variación: Sacude tus almohadas con puñetazos.

3 Movimientos de evasión

Frente al espejo, con las manos en puño imagina a un contrincante a punto de atacarte.

Muévete, brinca, gira, agáchate, golpea y tira patadas. No dejes de gritar.

Variación: Sal al patio o a la azotea, busca tu sombra e imagina que estás en una pelea con ella. Por favor, asegúrate de ganar….

4 Salto de soga o cuerda

Ahora vas a saltar la cuerda como cuando eras chiquita. Usa zapatos deportivos y un buen sostén para tus senos. Alterna con tiempos de un minuto de saltos con tres de descanso. Escucha a tu cuerpo, no exageres.
Variación: En lugar de agacharte para recoger los objetos que dejan tirados en el suelo tus hijos, ve saltando alrededor de ellos, como si fueran obstáculos. Si puedes, salta alternando las piernas para fortalecerlas.

Diviértete lo más que puedas, porque al final del ejercicio, si tendrás que recogerlos……