Si has notado que tu pelo ya no es el mismo, no se riza, no se acomoda, está esponjado y estás a dos minutos de raparte, es momento de darle oportunidad a un método que se ha popularizado en el mundo: el método Curly.
Este sistema consiste en seguir pasos específicos al bañarte y eliminar todos los productos pesados o nocivos que abundan en el mercado y optar por aquellos más naturales con la intención de devolverle la textura natural a tu pelo sin importar si lo tienes ondulado, chino o lacio.
El método Curly se creó en el 2007 por Lorraine Massey y consiste en comprar productos más suaves como acondicionador, mascarillas para el cabello y gel.
Para muchas mujeres, este sistema es complejo de entender, así que, si estás buscando la forma más sencilla de realizarlo, los expertos de Chili&Chili traen para ti una guía sencilla para principiantes:
Utiliza un champú de limpieza profunda para tu primer lavado
Para poder iniciar con este método, es necesario reiniciar tu pelo y para ello, es recomendable hacerlo con un champú que contenga ingredientes naturales y que esté libre de parabenos, sulfatos y siliconas.
Una de las mejores opciones para hacerlo, es un champú que contenga aloe vera, nopal y romero para lograr un equilibrio en la grasa que producimos de manera natural en la piel cabelluda, sin maltratarlo.
Este champú se recomienda utilizarlo una o dos veces por semana. Al salir de bañarte, aplica una mascarilla hidratante por dos horas, enjuaga y posteriormente utiliza un acondicionador hidratante para finalizar con un gel que te ayude a estilizarlo.
Co Wash para los lavados posteriores
Como sabes, parte del Método Curly consiste en eliminar el uso recurrente de champú; por lo que tu aliado al bañarte los días que no hagas una limpieza profunda será el Co Wash.
Se determina Co Wash al paso cuando te lavas el pelo sin utilizar champú, es decir, utilizas solamente un acondicionador hidratante al bañarte que, aunque no lo creas, te limpia, pero que no te quita los aceites naturales de tu pelo evitando que este se reseque.
Olvídate de las herramientas de calor
Sí, aléjate de rizadores, secadores, planchas, ferros y demás. Si los utilizas durante el método, corres el riesgo de dañar seriamente tu pelo.
De hecho, puedes llegar hasta freírlo. Lo mejor es utilizar una playera de algodón para secarlo con apretujones de abajo hacia arriba o bien, usar una secadora a temperatura fría con un difusor, de esta manera se distribuirá el aire de forma moderada sobre tus rizos.
No lo cepilles
Si eres de las que cepilla su cabello al salirse de bañar, déjanos decirte que lo estás reventando; la estructura del pelo es frágil y vulnerable, especialmente cuando se encuentra húmedo. Lo mejor es desenredarlo con los dedos, especialmente dentro de la regadera.
Al utilizar tus dedos para desenredarlo, serás más consciente de tus nudos y evitarás romperlo. Además, esto te permitirá dar masaje a tus rizos, distribuyendo su hidratación.
Repite el proceso
El Método Curly requiere paciencia y prácticamente es una rutina que debes seguir al pie de la letra y si te llegas a equivocar y utilizas el producto de limpieza profunda el día que no es, tendrás que seguir con el paso dos y así consecutivamente.
Con estos consejos te será mucho más fácil darle a tu pelo el cuidado necesario para darle vida y devolverle su textura natural de una forma sana con productos libres de ingredientes tóxicos y nocivos. ¡inténtalo!