La práctica de cualquier deporte produce una serie de lesiones en los pies. Toma nota de algunas recomendaciones para prevenirlas. Imagen: Depositphotos.
La práctica de cualquier deporte produce una serie de lesiones en los pies. Toma nota de algunas recomendaciones para prevenirlas.
Hacer ejercicio resulta indispensable para mantener una vida saludable y el cuerpo en forma. Sin embargo, las personas que realizan deporte constante, incluso los amateur, deben poner estricta atención porque existen lesiones comunes que muchas veces pasan completamente desapercibidas y, que con el tiempo, causan problemas y dolores agudos.
Hacer ejercicio resulta indispensable para mantener una vida saludable y el cuerpo en forma. Sin embargo, las personas que realizan deporte constante, incluso los amateur, deben poner estricta atención en las lesiones que muchas veces pasan completamente desapercibidas y, que con el tiempo, causan problemas y dolores agudos. Imagen: Depositphotos.
Los pies son la parte del cuerpo que más sufre durante la práctica de cualquier deporte, señala Gloria Newell, Directora General de Piedica México. Y da un ejemplo: en una carrera de 5km, el pie colisiona con el suelo más de cuatro mil ocasiones, de ahí que se puedan desprender traumatismos como torceduras y esguinces de las articulaciones de tobillos y rodillas, los cuales se producen cuando son llevados más allá del límite de la elasticidad de sus ligamentos ante movimientos bruscos.
La experta en la Salud del pie, comenta que los síntomas predominantes de este problema -común en casi todos los deportes- son dolor, inflamación de la zona y movilidad dificultosa, mientras que el tratamiento inmediato es un vendaje ligeramente compresivo para mitigar la hinchazón y compresas de hielo en la zona afectada. La luxación o dislocación, en cambio, es una lesión que aparece cuando dos huesos que deberían encajar uno en otro se salen de su sitio, indica.
Descuidos y lesiones
La práctica de cualquier actividad deportiva produce una serie de lesiones de la extremidad inferior y de espalda baja que son consecuencia directa o indirectamente del pie y la forma de apoyar, tales como:
De acuerdo con la experta, existen también las fracturas por estrés en los corredores, es decir, lesiones producidas por el microtrauma repetitivo y frecuentemente ubicado en tibia y metatarsos. Imagen: Depositphotos.
• Luxaciones (del astrágalo, subastragalinas y de los dedos).
• Torceduras y Esguinces de tobillo. • Distensiones musculares y ligamentosas (causadas por pronación o supinación del pie).
• Lesiones causadas por estrés, exceso de presión ejercida en una zona.
• Fracturas.
De acuerdo con la experta, existen también las fracturas por estrés en los corredores, es decir, lesiones producidas por el microtrauma repetitivo y frecuentemente ubicado en tibia y metatarsos.
Un dolor localizado sobre una superficie ósea que esté relacionado con un incremento de la actividad física es una señal para el diagnóstico de una fractura de estrés.
Aunque pocos casos requieren cirugía, el tratamiento incluye, además de una educación apropiada, reposo activo, uso de anti-inflamatorios esteroideos, control radiológico seriado, terapia física cuando sea necesaria y un retorno controlado al entrenamiento y competencia. • Otro problema grave es utilizar un calzado inadecuado.
La especialista menciona que un mal calzado origina contusiones al correr, saltar, frenar o caminar: “La presión que se ejerce sobre las plantas de los pies cuando el individuo camina es tres veces su peso corporal.
La elección del calzado deportivo con dimensiones adecuadas en la amortiguación y alineación biomecánica más el estudio biomecánico de la pisada y uso de plantillas personalizadas ayudarán a prevenir lesiones y sobre todo, a aumentar el rendimiento”.
Para mayor información puedes visitar la página web: www.piedica.com
