Presentan libro “A mí no me va a pasar” el cual contiene 18 historias reales de víctimas y sobrevivientes de trata y permite conocer, a partir de historias reales, las diversas modalidades de este delito y alertar sobre sus riesgos. Buscando acercar a jóvenes y público en general a conocer el problema sin miedos.
La Comisión Especial de Lucha Contra la Trata de Personas y el Comité y el Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad de Género (CEAMEG) presentaron el libro “A mí no me va a pasar”, donde diputadas, funcionarios públicos y expertos coincidieron en la urgencia de atender y prevenir este problema.La obra contiene 18 historias reales de personas víctimas y sobrevivientes de este delito, escritas por 10 periodistas a partir de crónicas, cuyo fin es comprender, aprender y dialogar sobre el tema y reconocer sus diferentes modalidades.
La presidenta del Comité del Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad de Género (CEAMEG), diputada Flor de María Pedraza Aguilera, advirtió que es necesario adoptar y aplicar leyes modernas contra la trata de personas, que fortalezcan los sistemas judiciales, que las víctimas sean atendidas y nunca más sean explotadas.La trata de personas es la esclavitud moderna. No se le puede llamar de otra manera cuando quienes se encuentran trabajando en una empresa o el campo con poca o ninguna paga son atrapados sin oportunidad de huir. Por ello, continuó, el libro es una interpelación a cada persona para identificar, conocer y evitar la degradación de la humanidad, dado que este problema nos afecta a todos.
Pedraza Aguilera precisó que erradicar la trata de personas debe ser preocupación de instituciones, empresas y ciudadanía porque atañe a cada nación, y pone en peligro la salud pública, la dignidad humana y favorece la violencia y el crimen organizado.
“Debemos seguir combatiendo este mal, difundir lo que pasa y crear conciencia de sus secuelas”, apuntó.
La presidenta de la Comisión Especial de la Lucha Contra la Trata de Personas, diputada Leticia López Landero, indicó que comprender este flagelo es una necesidad urgente porque nadie está exento a ser víctima.
Hizo un llamado al Senado de la República para aprobar una minuta en torno a la trata de personas, y al gobierno federal para que se sensibilice ante este problema; “son importantes los temas energéticos y laborales, pero los humanos, los que vivimos a diario los mexicanos, a esos requerimos poner atención”, afirmó.
El secretario general de la Cámara de Diputados, Mauricio Farah Gebara, preguntó: qué puede hacerse frente a una conducta criminal que utiliza al ser humano como mercancía y genera millones de dólares en ganancias, qué puede hacerse frente a la absoluta indiferencia de los tratantes ante el dolor humano, ante quienes comercian con personas y las convierten en esclavas del siglo XXI; se requiere, dijo, convencer, comunicar y crear conciencia para vencer la apatía social.Si hoy, detalló, el uso doloso de la tecnología, el anonimato de las grandes urbes y la vulnerabilidad de las pequeñas comunidades es un aliciente para los tratantes, la unión de todos puede hacer que se vuelvan inoperantes. “Acciones como este libro evitan que la sociedad se habitúe como algo natural al engaño, la fuerza y que la ambición delictiva esté por encima del derecho a la libertad de las personas”.
“A mí no me va a pasar”, continuó, es un exhorto a recuperar nuestra capacidad de indignación, la que suele romper la indiferencia sólo cuando la víctima es cercana, pero debemos entender que cada niña, niño, mujer y hombre explotados son parte nuestra, por lo que la suma de lo que hagamos sobrepasará la actuación de estas bandas delictivas.
La directora general del CEAMEG, Marina Mandujano Curiel, dijo que la trata es uno de los delitos más lucrativos para los grupos delincuenciales, sólo superado por el tráfico de drogas y armas, de acuerdo con datos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.
Subrayó que, según organizaciones internacionales del trabajo, la trata de personas genera ganancias económicas estimadas en 32 millones de dólares, de los cuales, más del 85% provienen del comercio sexual.
“Debido a que existen escasos datos estadísticos en este tema, precisó, se considera un fenómeno de dimensiones desconocidas, el cual en muchas ocasiones no es identificado, ni denunciado”, acotó.
De acuerdo con la ONU, expresó, en el 2007 y 2010, la mayoría de las víctimas de trata que se detectaron a nivel mundial eran mujeres; por ello, “desde este espacio hacemos la invitación a difundir este libro, ya que la cultura de la prevención y la denuncia deben ser una práctica cotidiana”.
En tanto, la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) Lorena Cruz Sánchez, indicó, “la trata de personas es un tema que nos preocupa, pero sobre todo, que nos ocupa y que nos duele”.
Expresó que la obra servirá para visibilizar el problema que nos lacera como sociedad. Añadió que “sólo trabajando de manera coordinada, gobierno y los tres poderes de la unión, podremos lograr que ya no exista la trata en México, sólo así podremos trabajar en la prevención”.
El representante en México de la Organización de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, Antonio Luigi Mazzitelli, resaltó que se debe seguir trabajando para que la Ley contra la trata de personas sea más fuerte y el dispositivo penal sea más rígido. “No podemos permitir que alguien se aproveche de otro ser humano, por lo que la norma en la materia debe ser protectora de las víctimas y trabajar en la prevención”.
La historia de la víctima ultrajada en una tintorería en el Distrito Federal, es una muestra de que la crueldad del ser humano no tiene límites. “Espero que la próxima Legislatura y el Senado fortalezcan la ley y no la debiliten, que continúen con este trabajo para obtener una conciencia ciudadana más fuerte y activa”, apuntó.
La directora general del Programa contra la Trata de Personas de la CNDH, Yuridia Álvarez Madrid, enfatizó que no se debe quedar sólo con una cuestión jurídica de este delito, “tenemos que ir más allá y abarcarlo desde la parte social y cultural; por ello, el libro nos da una visión a partir de historias reales sobre esta agresión”.
Mencionó que uno de los problemas que se presentan es cómo abordar este tema. Insistió que la obra materializa este fenómeno de manera clara y sencilla; es una forma de acercar a los jóvenes y al público en general a conocer el problema sin miedos.
Referencias
- “A mí no me va a pasar” http://www3.diputados.gob.mx/camara/content/download/331749/1178263/file/A_mi_no_libro.pdf