Con esta obra teatral -que lleva más de 30 representaciones y esperan llegar a las 100-, se exploran nuevas formas de interacción con la comunidad, a fin de que aprendamos que la salud mental debe cuidarse como se hace con la salud física para poner los ojos en la locura, que nos hace entrar en razón

La escena se desarrolla un sábado por la tarde, en una de tantas casas de la colonia Santa María la Ribera. Una mujer de mediana edad plancha una camisa en medio de un cuarto rodeado de basura. Súbitamente suspende actividad. Ha descubierto una huella de lápiz labial de otra mujer.

Así comienza la primera escena de la obra «Mañana Nunca Te Conoceré«, protagonizada por el grupo Mentes Inquietas, que integran pacientes del Centro Comunitario de Salud Mental (CECOSAM) Cuauhtémoc, y que dirige el psicólogo, Roberto Rodríguez.

A lo largo de 30 minutos, una familia representa una serie de problemas ligados a la salud mental, como depresión, ansiedad y psicosis, explicó el director del CECOSAM, el doctor Rogelio Gallegos Cázares.

Refirió que esta obra de teatro es parte de la rehabilitación que se logra con los actores-pacientes, ya que suben su autoestima y proyectan en sus papeles de actuación muchas de sus emociones y sentimientos.

El director del CECOSAM Cuauhtémoc reconoció que este método ha servido para difundir el mensaje de una forma directa y practica a la población, porque el espectador llega a identificarse con la situación o con los personajes. Terminada la representación, el público pasa a formar parte de la escenografía y ellos son los que hablan, comparten sus sensaciones y sentimientos.

El doctor Gallegos Cázares afirmó que este tipo de ejercicio ha resultado útil, porque más de uno de los asistentes en ese momento preguntan sobre su situación particular.

“Esto ha permitido que se incorporen como pacientes de nuestro centro, hecho que es una de las finalidades: acercar los servicios a la población que, por motivos de estigma, no lo hacen, debido a que asocian salud mental a enfermedades mentales graves, como la psicosis”, relató.

Sin embargo, indicó, cuando ven en escena que los problemas de ansiedad o depresión, son relativamente comunes, se animan y buscan atención especializada.

Refirió que esta estrategia refuerza el trabajo comunitario que realizan diariamente en las escuelas, sindicatos, organizaciones, centros de salud o laborales, donde solo se expone la parte teórica.

A su vez, Roberto Rodríguez indicó que en el 2016 se lanzó la convocatoria, en el cual participaron 18 pacientes y luego de 6 meses de ensayos, la obra se protagoniza con 6 personas que van de los 10 a los 75 años de edad.

El domingo pasado iniciaron la tercera temporada, comentó Roberto Rodríguez, quien refiere que cada presentación es diferente, pues los actores improvisan una parte de su diálogo sin perder la esencia de la obra.