Cada año, cinco de cada 10 personas tienen como propósito mejorar la salud y hacer ejercicio, pero son pocos los que buscan  mantenerse en forma. De acuerdo con David Jiménez, Nutriólogo y Gerente de Enlace Inter-Empresarial y Proyectos Wellness®, Integrando un entorno laboral en armonía,  y Kines®, la salud no sólo se compone del estado físico sino del complemento de lo emocional, lo psicológico y lo social, por ello es importante que la persona aprenda a mediar cada uno de los rubros que lo componen, manteniéndolos siempre en balance. Aquí te damos algunas recomendaciones para tener una actitud saludable:

• Alimentación: Los nutriólogos de Wellness® y Kines® enseñan a balancear lo que podemos consumir de acuerdo a lo que utilicemos en nuestras actividades diarias, consumiendo más, aquellos nutrimentos o      micronutrimentos estrictamente recomendados y no exceder por suplementación.
• Ejercicio: La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda acumular a lo largo de una semana 150 minutos de ejercicio para mejorar los niveles metabólicos (presión arterial, glucosa en sangre, grasas en sangre y depósitos hepáticos, función renal, entre otros). David Jiménez recuerda que el cuerpo se compone de un 35 a un 40% como mínimo de músculos, los cuales se deben potenciar y utilizar para mantenernos saludables.
• Descanso:Se ha demostrado en varias publicaciones científicas serias que el no dormir y descansar nos condicionan a más enfermedades metabólicas, neuropsiquiátricas y psicológicas. El descanso no significa dormir más de lo común ni aprovechar quedarnos en cama después de desvelarnos en la fiesta, sino que debemos cumplir con el tiempo necesario en el cual nuestro cuerpo repara y produce tejidos dañados, ciertas hormonas que no se producen en el día (hormona de crecimiento), además de regular el sistema inmunitario y de que el subconsciente se haga presente y nos distraiga de las actividades cotidianas que llevan a un nivel estrés anormal.
• Hidratación: ¿Cuál es la cantidad de agua ideal que debemos tomar? Depende de muchos factores, se ha estandarizado como promedio de 2 litros diarios, los cuales podemos distribuir en 8 vasos de 250 ml. Entre mayor sea la actividad física realizada y/o mayor la exposición a calor mayor será el requerimiento de líquidos.
• Socializar: La mayoría de nuestras actividades o celebraciones giran alrededor de un círculo social. Aunque es fundamental socializar se recomienda evitar los lugares en los cuales hayan determinantes en salud que nos perjudiquen como es el caso del cigarro, los cuales tienen un impacto en detrimento en nuestra salud. Procurar los lugares donde se conjunte un ambiente social divertido y sano o bien fomentar las reuniones al aire libre donde no haya acumulación de gases tóxicos y se pueda practicar alguna actividad física, consumiendo alimentos servidos por la familia pero con menos tortillas y prefiriendo iniciar con una ensalada o botanas saludables.
• Emocional: Realizar alguna actividad para mantenerse saludable libera más hormonas que nos brindan diversas emociones como la sensación de bienestar y felicidad. Cada emoción tiene una respuesta neuroquímica en nuestro cerebro, lo cual se traduce en lo siguiente: 
  • Ejercicio + alimentación saludable = Hormonas
  •  Ejercicio + descanso = Hormonas
  • Alimentación saludable + Entorno social = Hormonas
  • Hidratación + Alimentación saludable = Hormonas
  • Hidratación + Entorno social = Hormonas
  • Descanso + Alimentación saludable = Hormonas
  • Descanso + Entorno social = Hormonas

“Cada hormona despierta o activa una respuesta de felicidad, placer o  tranquilidad en el ser humano, por ello, hacer lo que nos gusta y cómo nos gusta nos da placer pero no siempre salud, en cambio, tener hábitos saludables que nos generen placer siempre nos traerá en consecuencia salud. Disfruta tu inicio de año y mejora tu entorno saludable con el paso más importante: Conciencia y ganas de empezar a mejorar”, concluye David Jiménez.