2020 ha sido un año muy complicado para toda la humanidad, por lo que todos anhelamos un descanso y al tener las vacaciones decembrinas en puerta, muchos querrán viajar, descansar o ver a sus seres queridos.
Sin embargo, esto puede ser complicado debido a la pandemia por COVID-19 y a la alarmante escalada de contagios y la saturación de los servicios de salud en varias entidades del país y del mundo entero.
La Dra. Corinna Keenmon, Especialista en Psiquiatría y Psicología del Hospital Houston Methodist nos habla sobre la complejidad que el estrés de la pandemia ha ocasionado en la salud mental de las personas que se sienten solas, ansiosas y exhaustas emocionalmente.
Si este es tu caso, la especialista nos hace una recomendación muy puntual con respecto a las fiestas decembrinas de este año y nuestra salud mental: “Este año tan peculiar, no idealices la temporada decembrina, no esperes perfección como en otros años e intenta mantener una rutina diaria saludable.
Sé muy consciente y ten mucho cuidado de las drogas, el abuso de alcohol y del cigarro. Piensa que todo esto es pasajero.”
Sin embargo, para muchos el estrés por alejarse y recargarse de energía renovada es una necesidad apremiante y algunas personas no se quedarán en casa a pesar de las recomendaciones.
Si este es tu caso quizás te preguntes, ¿es seguro viajar en estos días durante la actual crisis de COVID-19?
Los especialistas del Hospital Houston Methodist basados en los lineamientos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) continúan recomendando quedarse en casa, ya que viajar aumenta el riesgo de contraer y propagar COVID-19.
Si aun así, estás dispuesto a hacer un viaje, aquí hay cuatro cosas que debe considerar al planear unas vacaciones durante la pandemia de COVID-19 para disminuir el riesgo de infección:
¿Adónde deberías ir?
Antes de decidirte por un destino para tus vacaciones, hazte las siguientes preguntas:
¿Se está propagando ampliamente el virus donde vivo?
¿Se está propagando ampliamente el virus a donde quiero ir?
Puedes usar el rastreador de datos COVID-19 de los CDC para ver la cantidad de casos y la tasa de infección de un lugar a otro, así como el total de casos y muertes?
Si vives en un área donde el virus se está propagando, considera la posibilidad de ser más cauteloso en las semanas previas a tus vacaciones.
Esto puede ayudar a reducir tus probabilidades de enfermar y propagar COVID-19 inadvertidamente durante tu viaje. Incluso podrías considerar posponer tu viaje hasta que los casos disminuyan en tu lugar de origen.
¿Qué harás mientras estés allí?
Dondequiera que elijas ir para tus vacaciones, querrás asegurarte de evitar las multitudes y mantener una sana distancia lo más posible.
Por ejemplo, el distanciamiento social es mucho más difícil en una ciudad llena de aceras y restaurantes concurridos que en una con una expansión geográfica significativa, donde puede conducir fácilmente de un lugar a otro.
¿Cómo llegarás?
Dada la necesidad de distanciamiento social, 2020 puede convertirse en el año del road trip.
En comparación con sentarse cerca de un grupo de extraños en un avión, conducir definitivamente parece una forma más segura de viajar durante una pandemia.
Pero un viaje por carretera no es completamente seguro, por lo que deberás asegurarte de tomar precauciones adicionales al detenerte en las estaciones de servicio y las paradas de descanso.
Si decides viajar en avión, considera lo siguiente para hacer tu viaje menos riesgoso:
Toma decisiones inteligentes al reservar
La reducción del riesgo comienza con las decisiones que tomas al reservar tu vuelo, como evitar escalas y conexiones, elegir un destino con un vuelo relativamente corto y optar por un asiento junto a la ventana.
- Usa tu cubrebocas desde tu llegada al aeropuerto, hasta el término de tu vuelo.
- Mantén tus manos limpias, llevando contigo un desinfectante a base de alcohol.
- Como siempre, lávate bien las manos después de usar el baño. Intenta no consumir alimentos en restaurantes dentro del aeropuerto.
¿Dónde te quedarás?
Las dos opciones principales de alojamiento durante las vacaciones suelen ser hoteles y alquileres de casas. De acuerdo a los especialistas del Hospital Houston Methodist, estos son los pros y contras de cada opción durante la pandemia de COVID-19:
Ventajas de alojarse en un hotel durante el COVID-19: la mayoría de los hoteles cuentan con estrictos estándares de limpieza y protocolos de sanitización, y muchos han mejorado estas medidas durante la pandemia.
Esto significa que probablemente no tendrás que preocuparte por las superficies potencialmente contaminadas en tu habitación de hotel.
Los contras de alojarse en un hotel durante el COVID-19: los hoteles suelen estar llenos de otras personas y espacios comunes.
Durante tu estadía en un hotel, deberás asegurarte de mantener suficiente espacio con otros huéspedes en los pasillos, ascensores y espacios comunes. Evita los lugares cerrados con otras personas.
Ventajas de alquilar una casa: Alquilar una casa privada puede ser una buena forma de limitar la cantidad de personas con las que entras en contacto durante tu viaje. Además, te brinda la capacidad de cocinar tus propias comidas.
Las desventajas de quedarse en una casa de alquiler: Las casas de alquiler no necesariamente tienen la misma garantía de limpieza que puede esperar de un hotel de buena reputación.
Antes de reservar, pregunta qué se está haciendo para asegurarte de que la casa esté completamente limpia entre estancias de huéspedes. Y, al llegar a la casa de alquiler, es posible que desees considerar el uso de toallitas desinfectantes para desinfectar las superficies que se tocan comúnmente donde los gérmenes tienden a esconderse.
La pandemia de COVID-19 sin duda hace que planificar unas vacaciones seguras sea un desafío. Hay muchas opciones que tomar y algunas opciones son más seguras que otras.
Sin embargo, en última instancia, son tus vacaciones. Dependerá de ti sopesar los riesgos y las recompensas de viajar y tomar decisiones inteligentes y seguras tan a menudo como sea posible durante tu viaje. De cualquier manera, la última recomendación siempre será: “Quédate en casa”.