Las hormonas en la vida de las mujeres

¿Qué tanto influyen las hormonas en la vida de las mujeres? Un experto en Biología de la Reproducción Humana, nos brinda un enfoque diferente sobre este tema.

Ante muchos males, sobre todo vinculados a las mujeres, es común escuchar expresiones como “son sus hormonas” o “tiene locas las hormonas”, entre otras. Y esto tiene su parte de razón porque las hormonas son sustancias segregadas por las glándulas, que al llegar al torrente sanguíneo provocan reacciones en las células que forman los órganos, influyendo en su funcionamiento, en el desarrollo, en la reproducción, en las características sexuales, en el uso y almacenamiento de energía, así como en los niveles de líquidos, sal y azúcar en la sangre.

Desde el punto de vista reproductivo juegan un papel muy importante, pues son las sustancias que se producen en el ovario, y que desempeñarán funciones en órganos “blanco” como lo es el tejido útero o en el propio ovario, lo cual tiene incidencia directa en el estado emocional de la mujer.

Todos los ciclos de vida de las mujeres están regidos por la acción hormonal, cuya concentración es mayor en algunos días. Las hormonas que intervienen son: la folículo estimulante (FSH), encargada de regular el desarrollo y los procesos reproductivos; los estrógenos, responsables de las características sexuales femeninas tales como desarrollo de las mamas y el ciclo menstrual; la progesterona, que estimula el crecimiento del endometrio, membrana protectora en el útero en donde el óvulo fecundado se implanta y ayuda a la producción de leche; cortisol, hace que el organismo libere glucosa a la sangre para enviar cantidades masivas de energía a los músculos en situaciones de estrés; testosterona, que propicia el apetito sexual, la presencia de menos grasa en el organismo e incide en la autoestima; oxitocina, que tiene relación con la sensibilidad y el ánimo y la tiroidea, que regula el metabolismo y, por ende, el peso y la talla.

Cuando hay alguna alteración en las glándulas, es decir, que existen complicaciones en la liberación de estas hormonas, habrá dificultades incluso para la reproducción, esta alteración puede ser orgánica, es decir, un daño estructural por una enfermedad infecciosa o por la presencia de un tumor, o como en la mayoría de los casos, por una alteración funcional en las cuales no hay una enfermedad estructural, pero sí es inadecuada la función.

Son múltiples los síntomas que pueden indicar una deficiencia hormonal, éstos van desde fatiga constante, repentinos cambios en el ánimo o el peso, hasta alteraciones en el ciclo menstrual. De ahí la importancia de asistir a consulta médica y si el especialista lo considera pertinente, se deberán practicar estudios como el perfil hormonal que permite conocer el estado de los niveles de estas sustancias esenciales para las funciones propias de la feminidad, la reproducción y la propia calidad de vida de las mujeres.

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