La privación del sueño se ha vuelto un tema al que deberíamos darle mayor atención debido al impacto que puede generar en la salud, incluso en la vida sexual.
Datos de la 5ª encuesta anual sobre el sueño, de Philips, indican que solo el 49% de las personas están satisfechas con su sueño.
Entre los trastornos más comunes del sueño, la apnea obstructiva del sueño destaca por su seriedad al ser una afección crónica que provoca numerosas y breves paradas respiratorias durante el sueño.
Esta alteración se produce por el cierre a la vía respiratoria superior, impidiendo que el aire llegue a los pulmones durante ese tiempo, provocando una sensación de asfixia que hará que quienes tienen este padecimiento despierten frecuentemente durante la noche.
En México, uno de cada cuatro adultos tiene una alta probabilidad de padecer apnea obstructiva del sueño.
La falta de descanso producida por la apnea del sueño además de restar energía provoca dolores de cabeza, falta de concentración, depresión, cambios de humor, sobrepeso; y entre otras consecuencias la falta de deseo sexual. Al estar agotado por no dormir lo suficiente el deseo sexual será extremadamente bajo.
Un estudio publicado en el Journal of Sexual Medicine descubrió que la falta de sueño se asociaba con la disfunción eréctil en los hombres y problemas de excitación y dificultades orgásmicas para las mujeres.
Las personas que padecen apnea del sueño tienen más probabilidades de experimentar disfunción eréctil debido a los cambios en los niveles de testosterona, la principal hormona sexual en el hombre. Los niveles más altos de esa hormona ocurren durante el sueño REM, que es el sueño profundo producido al final noche. Si no se duerme lo suficiente para entrar en el sueño REM, no se obtienen esos niveles restaurativos de testosterona.
Además, como resultado de la tensión que ocurre en el cuerpo por la privación de oxígeno en las personas con apnea del sueño, también se ve dañada la función sexual.
Expertos de Philips, Compañía en tecnología de la salud, recomienda practicar una buena higiene del sueño para lograr una noche de descanso exitosa. Establecer una rutina para acostarse, tomar un baño tibio, meditar o leer antes de dormir, son actividades sencillas para practicar una higiene de sueño.
Así mismo si los trastornos del sueño están causando problemas de salud y afectando la vida sexual, recomiendan también realizar un estudio del sueño y acudir al médico para valorar el trastorno que se padece y determinar el tratamiento adecuado. En caso de padecer apnea obstructiva del sueño, existe la ventaja de contar con un tratamiento eficaz mediante presión positiva continua en las vías respiratorias (CPAP) que puede revertir casi por completo los efectos dañinos a la salud, concluyeron.