Según la Organización Mundial de la Salud, la salud sexual es un aspecto fundamental para la salud y el bienestar general de las personas y poder disfrutar de una vida plena. Es un estado de bienestar físico, mental y social con la sexualidad que busca que los individuos, las parejas y las familias mantengan una relación saludable con este tema.
Desde 2010 la Asociación Mexicana de Salud Sexual A.C. estableció esta fecha como un esfuerzo para sensibilizar y promover la sexualidad con un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y las relaciones sexuales. Además, es un espacio que busca informar desde diversos ámbitos para tener experiencias sexuales placenteras, seguras, sin coerción, discriminación ni violencia.
En la actualidad la salud sexual abarca los temas relacionados a la orientación sexual, la identidad de género, el placer, las relaciones y la expresión sexual individual. Por otro lado, se incluyen temas fundamentales como embarazos no deseados, disfunción y violencia sexual. Además busca erradicar prácticas nocivas como la mutilación genital femenina o el matrimonio infantil.
La salud sexual ha evolucionado
Actualmente la comprensión de la salud sexual ha evolucionado. En este momento es un tema que se considera parte del bienestar de las personas que va más allá de la ausencia de enfermedades.
En este sentido, los jóvenes conforman la generación más numerosa y son un grupo particularmente vulnerable. Esto porque las decisiones que toman en relación a su sexualidad tendrán un impacto permanente en sus vidas.
En este sentido, a nivel mundial cerca del 60% de adolescentes menores de 20 años que son sexualmente activos no usan métodos anticonceptivos. Esto los expone a riesgos como embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual.
En México, la situación es similar. Aunque algunos jóvenes conocen al menos un método anticonceptivo, más de la mitad no los utilizan en su primera experiencia sexual. Además, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2022, no conocen el uso correcto del condón y no lo utilizaron en su última relación sexual, particularmente las mujeres.
Es necesario cambiar el enfoque de la educación sexual
Es necesario cambiar el enfoque e incorporar elementos de bienestar emocional y social junto con una educación sexual libre de prejuicios y bien informada. En 2018 la mitad de las mujeres de 25 a 34 años tuvo su primera relación sexual a los 17.5 años. La edad mediana a la que comenzaron a usar métodos anticonceptivos de forma regular fue a los 19.6 años. Esto indicó que pasó un periodo de 2.1 años sin protección de manera continua. Lo anterior según la Encuesta Nacional de Dinámica Demográfica (ENADID).
Finalmente, en 2019 se logró la modificación en la Ley General de Educación que consiste en la obligatoriedad de incluir en los contenidos y planes de estudio que imparte el Estado, la impartición de la Educación Sexual Integral y Reproductiva.
Dicha educación busca influir en el ejercicio responsable de la sexualidad, la planeación familiar, la maternidad y paternidad responsable, así como la prevención de embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual.
Derechos sexuales
En el marco de la conmemoración del Día Mundial de la Salud Sexual, es importante recordar algunos derechos sexuales contemplados en los derechos humanos:
- A La igualdad y a la no-discriminación.
- A la autonomía e integridad del cuerpo.
- A una vida libre de tortura, trato o pena crueles, inhumanos o degradantes.
- A una vida libre de todas las formas de violencia y de coerción.
- A la privacidad.
- Al grado máximo alcanzable de salud, incluyendo la salud sexual que comprende experiencias sexuales placenteras, satisfactorias y seguras.
- A la educación y el derecho a la educación integral de la sexualidad.
- A contraer, formar o disolver el matrimonio y otras formas similares de relaciones basadas en la equidad y el pleno y libre consentimiento.
- A decidir tener hijos, el número y espaciamiento de los mismos, y a tener acceso a la información y los medios para lograrlo.