Al presidir la ceremonia de premiación a menores que ganaron el concurso de “Yo amo mis riñones”, la legisladora Lorena Cuéllar Cisneros apuntó que, junto con la ciudadanía, los políticos enfrentan el reto de trabajar todos los días para emprender las acciones necesarias que permitan erradicar la deficiencia renal, que representa un gran dolor a los pacientes que deben ser sometidos a hemodiálisis.
Este padecimiento tiene, además, un costo económico de dimensiones catastróficas que lastima severamente la economía de las familias, e incluso representa un gran reto para las autoridades del Sector Salud, acotó.Explicó que lamentablemente la deficiencia renal crónica va en aumento en todo el país, como es el caso de Tlaxcala que ocupa el tercer lugar de pacientes atendidos por esta enfermedad, pero si se considera la densidad demográfica, se ubica en primero.
Lamentablemente, subrayó, dicho padecimiento se registra en mayor porcentaje en la población infantil, en Tlaxcala en una sola familia pueden registrarse hasta tres menores afectados por deficiencia renal, con todas las consecuencias de sufrimiento y de impacto económico que representa.
Es por ello, subrayó, que se debe crear conciencia en los infantes de la gravedad de esta y otras enfermedades crónicas, a fin de fomentar la prevención y erradicar la enfermedad, a la par de que concretan leyes, como la de Niñas, Niños y Adolescentes en la que se garantiza la atención gratuita para menores de 18 años con deficiencia renal.
A esta se suman otras iniciativas, como la referente a que se realice un registro nacional de pacientes con deficiencia renal, a fin de conocer con certeza la situación real de la enfermedad en el país y actuar certeramente en su atención y prevención, así como la propuesta en materia de trasplantes, para que todas las personas sean donadores, excepto quienes manifiesten que no desean donar sus órganos al morir.
El presidente del Instituto de Investigaciones Nefrológicas, José Antonio Nuño Cruz, consideró por su parte que es tiempo de que los políticos promuevan mayormente labores conjuntas con la sociedad en la promoción de la salud, donde lo principal es prevenir a favor de la ciudadanía y de las finanzas del Sector Salud.
“Incrementar las donaciones y trasplantes es importante, pero más prevenir para evitar el aumento de la población enferma, y en ello es fundamental la educación a los niños, que debe realizarse de manera divertida, como es este concurso de ‘Yo amo mis riñones’, porque se logra mayor impacto para que tomen conciencia al usar su talento e imaginación, que a través de los mensajes de televisión«.
A nombre de los niños premiados, provenientes de distintos puntos de la República Mexicana, Estefanía Vázquez García, de siete años, comentó que es necesario educar a los niños en cuanto al cuidado a la salud, sobre todo en aspectos básicos como la alimentación, para evitar que desde la infancia se registren enfermedades como obesidad, diabetes, o como en su propio caso, un padecimiento cardiaco.
En la premiación participaron Malaquías López Cervantes, jefe del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UNAM; Socorro Vital Flores, presidenta del Colegio de Nefrólogos de México; Marco Sandoval Valle, coordinador del Programa de Posgrado en Artes y Diseño de la UNAM; y Omar de Jesús Ruiz, presidente de la Federación Mexicana de Enfermos y Trasplantados Renales.