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La hipersensibilidad en la piel, conocida entre los dermatólogos simplemente como sensibilidad en la piel, es aquella reacción o sensación en la piel percibida como comezón o enrojecimiento ante cambios climáticos, climas extremosos, aplicación de maquillajes de baja calidad u otras sustancias.
No está relacionada con problemas en órganos internos, pero se sabe que puede presentarse ante el consumo de ciertos medicamentos.
“Algunos medicamentos te hacen más sensible la piel. Si estás tomando un tratamiento para acné, a veces te produce sensibilidad, o si estás tomando un antibiótico como las tetraciclinas, eso también puede contribuir, o hasta provocar que te quemes más fácilmente ante el sol”, indicó el Dr. Rodrigo Gutiérrez Bravo, dermatólogo especialista en cirugía dermatológica y oncología dermatológica en PielClinic, y certificado por el Consejo Mexicano de Dermatología.
“Es un mito que las manchas en la piel, comúnmente conocidas como paño, sean un padecimiento relacionado con el hígado o el riñón; no tiene nada que ver. Estas manchas se presentan por factores hormonales, genéticos o por exposición al sol”, agregó.
Se sabe que de la población general, de un 10 a un 20 por ciento puede llegar a presentar alta sensibilidad en la piel. En el norte es más frecuente debido a los climas extremosos que se viven. Es más frecuente en las mujeres, porque los hombres tienen más testosterona, por lo que producen más grasa, lo cual reduce sus probabilidades de tener piel sensible.
Naturalmente, lo más recomendable es que ante cualquier síntoma en la piel, como puede ser comezón, piel seca,“con escamas” o enrojecimiento, se busque ayuda profesional, sobre todo si se tienen antecedentes familiares similares.
“Si hay síntomas pueden aplicarse crema, pero si no se les quita, pues ahí sí hay necesidad de acudir al dermatólogo. Si se ven secos y “con escamas”, hay que usar un protector solar por lo menos de factor 30, y aplicarse una crema; pero si esto sigue, entonces sí es necesario pedir ayuda”, puntualizó el Dr. Gutiérrez Bravo.
Existen ciertos antecedentes que nos pueden hacer pensar que podemos tener sensibilidad en la piel. Prácticamente el 100 por ciento de las personas con dermatitis atópica son propensas a tener la piel sensible. O si el padre y madre de un bebé tienen piel sensible, existe hasta un 60 por ciento de probabilidad de que su hij@ pueda padecerla.
“Existe una sensibilidad que sí se cura, otra nada más se puede controlar, sobre todo la que es únicamente una cuestión genética. En el caso de los bebés de padres con piel sensible, lo más recomendable es que desde pequeños los protejan del sol”, mencionó el Dr. Rodrigo.
Algunas medidas que te pueden ayudar a prevenir, o en su caso aliviar la sensibilidad en la piel, son:
- Siempre protégete del sol. Usa sombrero y protector solar.
- Date baños cortos con agua tibia, sólo 10 minutos. Procura no tallar tu piel.
- Si vas a realizarte algún procedimiento dermatológico, ¡ojo, siempre consúltalo antes con tu médico!
- No trates de probar con remedios caseros ya que generalmente empeora el estado de tu piel.
- Si estás consciente de tener la piel sensible, elige productos que contengan la leyenda: “Para piel sensible”.
- Usa jabones cremosos y sin aroma.
¡Protege tu piel en esta época de frío!
