Los hombres que se someten a una cirugía para remover cáncer en la próstata pueden sufrir de ansiedad después de un año de la cirugía, lo que puede afectar su desempeño sexual.
Y niveles altos de ansiedad pueden llevar a satisfacción sexual baja y depresión, dicen investigadores de Mayo Clinic en Jacksonville, Florida. Su reciente estudio, publicado en la edición digital de Psycho-Oncology, sugiere que hombres que experimentan niveles altos de “ansiedad atribuida al cáncer” después una cirugía de la próstata pueden beneficiarse de consejería dirigida a sus preocupaciones y mejorar su calidad de vida.
“La tasa de sobrevivencia a 10 años para un hombre que se somete a cirugía para remover un cáncer localizado en la próstata es mayor de 95%. Dado que la mayoría de los hombres que se someten a una prostactetomía para cáncer de la próstata no van a morir de la enfermedad, nuestra preocupación es con el tipo de vida que estos pacientes llevarán décadas después de su diagnóstico y tratamiento”, dice el investigador principal del estudio, Alexander Parker, Ph.D., un profesor asociado de epidemiología y urología.
Aunque el cáncer en la próstata puede ser una amenaza seria, la mayoría de los hombres que son diagnosticados con este mal no mueren por causa de él. De acuerdo a la Sociedad Americana del Cáncer (American Cancer Society), más de 2,5 millones de hombres en Estados Unidos, al menos, a quienes se les ha diagnosticado cáncer en la próstata siguen vivos.
“Las probabilidades de supervivencia por largos periodos de tiempo después de cirugía de la próstata son muy altas”, dice el cirujano y co-autor del estudio, Gregory Broderick, M.D., profesor de urología. “Eso significa que muchos hombres están viviendo como sobrevivientes de cáncer de la próstata, y nosotros en Mayo Clinic estamos comprometidos a entender los factores que afectan su calidad de vida, no meramente de su cantidad de vida”.
El Dr. Broderick presentó estos resultados en la reunión conjunta de Sexual Medicine Society of North America y de la International Society for Sexual Medicine, este verano, en Chicago.
Datos de estudios de pacientes con otros tipos de cáncer han mostrado que la ansiedad puede afectar significativamente la calidad de vida de una persona. “Nuestro estudio es el primero en demostrar que aquellos hombres con ansiedad específica al cáncer de la próstata un año después de la cirugía son más propensos a reportar niveles bajos de satisfacción sexual y niveles altos de síntomas de depresión”, dice Dr. Parker.
En su investigación, los doctores examinaron datos de 365 hombres quienes, a un año de la cirugía, completaron un formulario diseñado para medir sus niveles de ansiedad respecto a su diagnóstico y tratamiento de cáncer. Los hombres también completaron cuestionarios para medir sus niveles de función eréctil, satisfacción sexual y depresión.
“Lo interesante desde el punto de vista de salud sexual es que observamos que la ansiedad no está ligada a función eréctil baja en sí, sino que está ligada a niveles bajos de satisfacción sexual. Si nuestros resultados son confirmados por otros investigadores, podrían sugerir que la ansiedad no está afectando tanto la habilidad de algunos hombres en su desempeño sexual sino su habilidad de disfrutar su vida sexual”, dice el Dr. Parker.
Aunque Parker y sus colegas observaron que la ansiedad era generalmente mayor en aquellos hombres que tenían formas más agresivas de cáncer de la próstata basándose en informes de patología después de la cirugía, algunos hombres con formas menos agresivas de cáncer también reportaron niveles altos de ansiedad. “Entre este subgrupo específico de hombres con cáncer de la próstata menos agresivo, estamos hablando de tasas de sobrevivencia de casi 100%, sin embargo ellos piensan en el cáncer todos los días. Esto presenta una gran oportunidad para identificar a estos hombres y ofrecerles intervención con el fin de modificar este comportamiento ansioso”, comenta el Dr. Parker.
Mayo Clinic ofrece consejería para modificar comportamiento a pacientes de cáncer que deseen consultar psico-oncólogos. El Dr. Parker observa que los resultados de este nuevo estudio realzan la oportunidad de probar maneras nuevas de atender esta necesidad en hombres con cáncer de próstata.
“La ansiedad sobre un diagnóstico de cáncer puede llevar a síntomas de depresión más agudos y a la falta de disfrute de actividades de la vida diaria, incluyendo las relaciones sexuales. Estamos diseñando pruebas para ver si la consejería puede ayudar a estos pacientes”, concluye el Dr. Parker.
El estudio fue subvencionado en parte por una beca del Sexual Medicine Society of North America.