A través de los años, la reivindicación de la sexualidad, el placer y las distintas formas de vivir han cambiado, encaminándose hacia la aceptación, la diversidad y la apertura, pero aún falta mucho camino por delante. Derribar mitos continúa siendo un objetivo primordial, entre ellos el tabú de que la masturbación es “mala” o “sucia”, y en consecuencia la experimentación de nuevas sensaciones y el uso de juguetes sexuales.
En México, de acuerdo con un análisis de Platanomelón, la tienda online de juguetes eróticos líder en el país, el 68% de las mujeres entre 18 y 34 años no tienen un juguete sexual pero están dispuestas a comprar uno en el futuro.
Otra de las principales barreras es que no existe suficiente información sobre ellos; el 57% de las mujeres no sabe exactamente cómo funcionan o por qué deberían comprar uno.
Es por ello que, para dar un panorama más amplio, el equipo de Platanomelón comparte su guía de 4 puntos clave que debemos conocer para darles una oportunidad a los juguetes eróticos:
1. Acá va lo primero: qué son los juguetes eróticos o sexuales
Son objetos de diferentes materiales no tóxicos creados para usarse como complementos para la masturbación y los encuentros sexuales en pareja.
Existen diferentes tipos y su elección dependerá de distintos factores, además de que se puede tomar en cuenta el tipo de estimulación que deseas, el uso que le quieras dar, si se usará en pareja o a solas, y más. Cada persona es un mundo. “Los juguetes son eso: juguetes. Todos y todas aprendemos muchísimas cosas jugando, y el aspecto sexual no es la excepción”, menciona Karimme Reyes, Sexóloga Educativa.
2. Cómo elegir el juguete ideal
Algunas preguntas básicas pueden develar la respuesta, así que vayamos una por una:
¿Qué órgano sexual quieres estimular? ¿Tienes pene o vulva? Esto reducirá las opciones a las mejores para cada uno, ya sea para estimulación clitorial o interna, algún anillo vibrador, plug anal o estimulador prostático, entre otros.
¿Quieres un juguete para usarlo a solas o en compañía? De esto dependerá también tu selección, pues influye el órgano sexual de tu compañero y qué prefieren: experimentar nuevas sensaciones u orgasmos más intensos; esto último aplica tanto en solitario como en pareja.
¿Ya has tenido un juguete erótico? Si es tu primer juguete, hay opciones para ir descubriendo las nuevas sensaciones que pueden darte, en cambio, si ya has tenido, podría ser el momento ideal para dar un paso adelante con opciones que potencialicen la experiencia.
Los mejores materiales. Es muy importante que los juguetes estén hechos de materiales aptos para entrar en contacto con tu cuerpo, como la silicona de grado médico, así como que cumplan con estándares y controles de calidad.
No pierdas un ojo de la cara. No necesitas pagar muchísimo dinero para acceder a juguetes eróticos de alta calidad, diseños bonitos y amigables, además de que lleguen hasta tu casa de forma discreta, así que tómalo en cuenta. Por acá puedes hacer un test completo.
3. ¿Los juguetes sexuales se usan solos o acompañados?
Eso dependerá de cada persona. El uso a solas apoya el autoconocimiento y la autoexploración, lo que indudablemente lleva a saber qué sí y qué no le gusta a cada uno. Hacerlo en pareja saca de la rutina, ayuda a conocer mejor el cuerpo del otro y los puntos de excitación y placer.
En ambos casos, el juego se torna distinto y muy valioso para la relación personal y de pareja. Los juguetes suman, su objetivo no es reemplazar a las personas, sino aumentar las sensaciones placenteras y la capacidad de divertirse solo o acompañado. De hecho, el 83% de las mujeres en México ve natural su uso en pareja, y el 81% cree lo mismo sobre divertirse a solas con ellos.
4. Y yo como pa’qué lo quiero
Tener o no un juguete erótico es una decisión personal, pero es un hecho que éstos ayudan a conocer mejor nuestro cuerpo, las formas de darle placer y aquello que nos gusta o no. Es importante recordar que un juguete es para jugar, aprendemos de forma lúdica, y la sexualidad no tiene que ser aburrida, monótona o cuadrada. Es para divertirnos y disfrutar.
“La renuencia a tener un juguete sexual generalmente se deriva de los mitos y creencias de que son para las mal llamadas solteronas, las insatisfechas o que su uso puede causar adicción, pero esto solo representa un obstáculo para la autoexploración y conocimiento sexual”, puntualiza Karimme.
Eliminar viejas creencias e informarnos da la oportunidad de experimentar nuevas sensaciones y compartir información valiosa que apoye al empoderamiento de la sexualidad de las personas. Este camino es largo, pero cada día hay más espacios de confianza para hablar abiertamente con profesionales sobre estos temas.