Envejecer forma parte del proceso natural de nuestra vida, y uno de los signos más evidentes de ello son las líneas de expresión o también llamadas arrugas, que aparecen por diversas causas y en distintas zonas de la cara y el cuerpo.
Una de las zonas que más sufre el embate de los años es la de los ojos, donde suelen presentarse las “patas de gallo”, las ojeras, las bolsas debajo del párpado inferior, o que el párpado superior se cuelgue, afectando considerablemente la expresión del rostro.
Y aunque entendemos que el paso del tiempo es inevitable, podemos hacer que éste se vaya con pies de plomo y nos permita disfrutar por mucho más tiempo de la agradable juventud.
¿Cómo lograrlo?
Primero que nada, conocer que existen dos tipos de arrugas o líneas de expresión. Éstas pueden ser dinámicas y estáticas “donde las primeras aparecen cuando realizamos un gesto en especial, por ejemplo, las arrugas en la frente cuando levantamos las cejas; las segundas, son las que siempre vemos aún sin hacer algún gesto, como los surcos nasogeneanos”, comenta el Dr. Fernando Cherizola, médico especializado en medicina estética, con enfoque en armonización y antienvejecimiento.
Sabiendo esto, nos debe quedar claro que habrá arrugas que estarán más presentes que otras y que debemos aprender a cuidar de nuestra piel, tanto para que unas no se profundicen o marquen más, y para que otras se puedan disimular y retrasar su aparición.
Segundo, que lo ideal es recurrir a una valoración integral, realizada por un especialista donde se indique el porqué de su aparición; en ésta, se determina la calidad de la piel, la hidratación, el daño solar, si ha habido pérdida o aumento de peso, entre otros, y con ello, entonces, se sugiera el tratamiento o técnica más adecuada a seguir.
Como la aparición de arrugar es multifactorial, el Dr. Cherizola considera “que lo más importante es la prevención. Es importante ayudar a tu piel en todo lo posible: con protector solar, toxina botulínica, limpieza facial profunda, estimuladores de colágeno, entre otros”.
¿Qué hacer entonces?
Para las patas de gallo, uno de los tratamientos más efectivos para prevenirlas es la aplicación de toxina botulínica que reduce la aparición de las arrugas, al paralizar temporalmente el músculo, y alisar la piel de la zona.
Para el contorno de los ojos, lo que sugiere el especialista es la aplicación de rellenos de ácido hialurónico, sobre todo los de hidratación profunda; estos rellenos, indica el Dr. Cherizola, idealmente deberán ser de bajo peso molecular, como los no reticulados, que solo hidratarán, sin dar volumen, y por lo que su apariencia es muy natural.
Para los ojos cansados y para corregir sin recurrir a una cirugía de párpado superior, lo mejor será aplicar tratamientos que funcionan para eliminar o reducir la flacidez del párpado, de forma no invasiva y ambulatoria. Aunque, si se tratara de un exceso de tejido, se tendrá que recurrir a la cirugía.
Para las bolsas del párpado inferior, y antes de pasar por el quirófano, se pueden tratar combinando tratamientos con los que se logre un resultado natural y estético.
Para las ojeras, que suelen brindar un aspecto de ojo cansado, triste, sin vida, se pueden corregir con tratamientos despigmentantes.
Con ellos se consiguen resultados altamente efectivos, de hasta el 80% de la coloración, con una duración de meses hasta años si se cuida correctamente.
Es probable que más de uno de estos “problemas” se manifiesten juntos, y es por ello que el Dr. Cherizola nos recomienda hacer una sinergia de tratamientos ya que “los ojos es la zona más complicada de tratar de toda la cara” y con lo que aseguramos que lo que lleguemos a aplicar, sea lo más adecuado, y con el resultado más natural posible.
Por último, recurrir a especialistas correctamente certificados garantiza excelentes resultados y una recuperación correcta con los cuidados post tratamientos
“Se requiere de una capacitación avanzada para tratar ojos en su totalidad y muchas veces hasta diferentes especialidades tienen que estar integradas” concluye el especialista, con lo que es fundamental acercarse a clínicas y médicos con este expertise y preparación.