El Wall Street Journal publicó un artículo acerca de un nuevo proyecto llamado “Cognitive Fitness and Innovative Therapies” CFIT, “Salud Cognitiva y Terapias Innovadoras”, el objetivo es mantener a las personas en situación de riesgo de Alzheimer en buena forma intelectual y física.
El programa incluye dieta, ejercicios físicos e intelectuales, control de presión sanguínea y colesterol. De acuerdo al artículo “incluso si alguien está destinado a desarrollar la enfermedad, retrasar su aparición de unos años podría mejorar dramáticamente la calidad de vida”. Los participantes siguen un régimen de ejercicios y un plan de alimentación basado en la Dieta Mediterránea.
Los médicos frustrados por la falta de una cura, o incluso un tratamiento efectivo para la enfermedad de Alzheimer están intentando un nuevo enfoque: la prevención de la enfermedad.
Kenneth S. Kosik, codirector del Instituto de Investigación de Neurociencia de la Universidad de California en Santa Bárbara, lanzó CFIT con un centro en Santa Bárbara el año pasado. Dr. Kosik recomienda que las personas comiencen a la edad de 50 años.
“El momento en que alguien entra a mi consultorio con los síntomas de la enfermedad, puede ser demasiado tarde”, dice el Dr. Kosik, que tiene previsto abrir cuatro centros CFIT en Nueva York y California. La idea es que el estilo de vida puede retrasar o prevenir la enfermedad antes de que aparezcan los síntomas – o retrasar la progresión de la enfermedad de Alzheimer una vez que se manifiestan.
Las 50 personas actualmente inscritas en el programa CFIT no tienen síntomas clínicos todavía, pero ellos saben que tienen algún tipo de riesgo genético de contraer la enfermedad de Alzheimer. Esto generalmente significa que un familiar de primer grado tiene la enfermedad de Alzheimer, o con uno o dos copias del gen ApoE, que es un factor de riesgo del Alzheimer.
Los participantes, de entre 50 a 80 años de edad, asisten por lo menos una vez a la semana a CFIT, que se asemeja a un centro comunitario. Se someten a una evaluación inicial para determinar un nivel básico de aptitud cognitiva, y luego se vuelven a evaluar después de seis meses y un año. Se diseña un régimen para cada persona incluyendo ejercicio físico, dieta, retos de conocimiento, musicoterapia, e interacción social.
Como uno de los factores de riesgo para el deterioro cognitivo es no tener amigos, hay actividades sociales en el centro, que van desde una estación de Wii donde la gente puede participar en juegos de grupos para cantar y tocar música.
The Wall Street Journal
Marcus Amy Dockser