La diabetes es una enfermedad metabólica que provoca un aumento en la concentración y presencia de azúcar en la sangre, llamada glucosa, debido a un mal aprovechamiento y consumo de esta sustancia necesaria para dar energía al organismo.
Al menos el 50% de los pacientes con diabetes desarrollarán neuropatía diabética, una condición que al paso del tiempo daña temporal o permanentemente los nervios periféricos, explica el especialista en medicina interna José Luis Akaki Blancas, del Hospital Ángeles Metropolitano, quien agrega que “la neuropatía diabética combinada con una mala circulación sanguínea ocasiona úlceras o infecciones en los pies, problema conocido como pie diabético, principal causa de amputación de piernas de pacientes con diabetes”.
Al no corregir las altas concentraciones de glucosa, paulatinamente se deterioran las arterias más pequeñas de algunos órganos, ello incrementa el riesgo de desarrollar otras complicaciones severas. Por ejemplo, “si daña las arterias del corazón, puede presentarse un infarto; si son las de los ojos, una disminución de la visión por retinopatía; en el caso de dañar las arterias del riñón, nefropatía; y si son las de las extremidades inferiores, el pie diabético, por neuropatía diabética”, comenta.
Controlar con éxito la enfermedad y sus complicaciones, es un arduo trabajo que requiere de todos los apoyos científicos posibles.
Por ello, además de los programas de tratamiento que se llevan a cabo en varias instituciones del Sector Salud, mundialmente existen trabajos de investigación, como el estudio Sydney (Syntomatic Diabetic Neuropathy), que mostró que el ácido tióctico (Thioctacid) es una de las opciones terapéuticas más efectivas en la disminución de síntomas y mejoramiento de la función de los nervios en pacientes con neuropatía diabética.