Se presenta los resultados del un ensayo aleatorio «The MONITOR Trial» que es el primer gran estudio pragmático que examina el monitoreo de la glucosa en los Estados Unidos para conocer si ofrecen una ventaja significativa en el control del azúcar en la sangre y en la calidad de vida de los pacientes.
En el primer gran ensayo pragmático de este tipo en los Estados Unidos, los resultados de un estudio de la Facultad de Medicina de la UNC (University of North Carolina, Universidad del Norte de Carolina) demuestran que la comprobación de los niveles de azúcar en la sangre con tiras reactivas no puede ayudar a los pacientes diabéticos que no usan insulina.Investigadores de la Facultad de Medicina de la UNC han demostrado que los análisis de glucosa en la sangre no ofrecen una ventaja significativa en el control del azúcar en la sangre ni en la calidad de vida de los pacientes con diabetes tipo 2 que no reciben insulina. El artículo [1], publicado en JAMA Internal Medicine, detalla los hallazgos de un ensayo aleatorio llamado «The MONITOR Trial«.
La diabetes tipo 2 es una epidemia que afecta a 1 de cada 11 personas en los Estados Unidos. Para aquellos tratados con insulina, el control de los niveles de azúcar en la sangre con tiras reactivas en casa es una práctica aceptada para monitorear los efectos de la terapia con insulina. Sin embargo, la mayoría de los pacientes con diabetes tipo 2 no son tratados con insulina. A estos pacientes, a menudo, se recomienda el monitoreo de la glucosa, a pesar del actual debate sobre su efectividad en el control de la diabetes o mejora cómo se sienten los pacientes.
«Nuestros resultados del estudio tienen el potencial de transformar la práctica clínica actual para los pacientes y sus proveedores poniendo en el centro de atención la pregunta perenne, ‘¿probar o no probar?’«, dijo Katrina Donahue, MD, MPH, autora principal del estudio y Profesora y Directora de Investigación de UNC Family Medicine.
Durante el estudio, 450 pacientes fueron asignados a 1 de 3 grupos:
- Monitoreo del azúcar en la sangre
- Monitoreo de glucosa una vez al día
- Monitoreo de glucosa una vez al día con un mensaje de estímulo o instrucción personalizado a través de Internet.
La prueba se realizó en el transcurso de un año. Al terminar:
- No hubo diferencias significativas en el control de la glucemia en los 3 grupos.
- No se encontraron diferencias significativas en la calidad de vida relacionada con la salud.
- No hubo diferencias notables en hipoglucemia (bajo nivel de azúcar en la sangre), hospitalizaciones, visitas a la sala de emergencias. Entre los programas, tampoco hubo diferencias en el número de individuos que tuvieron que comenzar a usar el tratamiento con insulina para controlar mejor los niveles de azúcar en la sangre.
«Por supuesto, los pacientes y los proveedores tienen que considerar cada situación individualmente, ya que determinan si el monitoreo de la glucosa en la sangre es apropiado«, dijo Donahue. «Sin embargo, los resultados nulos del estudio sugieren que el autocontrol de la glucemia en la diabetes tipo 2 no tratada con insulina tiene una utilidad limitada, para la mayoría los costos pueden superar los beneficios«.
Actualmente en los Estados Unidos, la mayoría de los 25 millones de personas con diabetes tipo 2 no toman insulina. Ellos controlan su azúcar en la sangre con ejercicio, dieta, y a veces medicamentos como la metformina. Actualmente, el 75% de estos pacientes también realizan pruebas regulares de glucosa en la sangre en el hogar, generalmente por recomendación de un proveedor.
Los defensores de las pruebas de glucosa en sangre sostienen que las pruebas diarias promueven una mayor conciencia de los niveles de glucosa, lo que lleva a mejoras en la dieta y el estilo de vida. En el pasado, una serie de ensayos clínicos más pequeños han mostrado resultados mixtos al intentar verificar esto. Varios estudios sugirieron un beneficio al realizar las pruebas, mientras que otros no encontraron evidencia de beneficio, o encontraron que la prueba podría ser incluso perjudiciales. Las pruebas diarias ademas de imponer un costo financiero, también pueden tener un impacto mental, aumentando la tasa de depresión o ansiedad en algunos pacientes.
«No hubo diferencia alguna entre los dos tipos de pruebas«, dijo la doctora Laura Young, neurocientífica de la UNC, primera autora del estudio «Enhanced Self-Monitoring Blood Glucose, in the pragmatic setting of regular daily life, offered no additional health benefits«, (Aumento de la auto-vigilancia de la glucosa en la sangre, en el entorno pragmático de la vida diaria regular, no ofreció beneficios adicionales para la salud).
«Ha habido una falta de consenso, no sólo en los Estados Unidos, sino en todo el mundo«, agregó Young. «La falta de directrices estándar hace que sea aún más difícil para los pacientes, que ya están luchando para manejar una condición crónica y al final del día, los pacientes tienen que tomar una decisión«.
Los pacientes que viven con diabetes deben discutir la necesidad de monitorear sus niveles de azúcar en sangre con sus proveedores de atención médica. Si juntos un paciente y su proveedor deciden que el monitoreo de azúcar en la sangre no es necesario, los pacientes podrían ahorrarse cientos de tiras reactivas y ahorrar cientos de dólares cada año, al menos hasta que se requiere el tratamiento con insulina.
Para conocer las declaraciones de conflictos de interés y fuentes financiamiento se encuentran la página en internet http://jamanetwork.com/journals/jamainternalmedicine/fullarticle/2630691
Referencias
- Laura A. Young, MD, PhD; John B. Buse, MD, PhD; Mark A. Weaver, PhD; et al Maihan B. Vu, DrPH, MPH; C. Madeline Mitchell, MURP; Tamara Blakeney, BS; Kimberlea Grimm, BAS; Jennifer Rees, RN, CPF; Franklin Niblock, BS; Katrina E. Donahue, MD, MPH; Glucose Self-monitoring in Non–Insulin-Treated Patients With Type 2 Diabetes in Primary Care Settings A Randomized Trial for the Monitor Trial Group; JAMA Intern Med. Publicadi en internet 10 de junio de 2017; DOI:10.1001/jamainternmed.2017.1233; Disponible en el URL http://jamanetwork.com/journals/jamainternalmedicine/fullarticle/2630691