En el marco de la 68ª Asamblea Mundial de la Salud, la doctora Mercedes Juan, recalcó que las naciones de las Américas enfrentan un nuevo reto en las enfermedades emergentes, como la fiebre del Chikungunya por lo cual se requiere de acciones en todos los niveles de gobierno, pero sobre todo, de la participación activa y decidida de la comunidad.
A fin de controlar la trasmisión del virus del Chikungunya y mitigar el impacto en la población, la Secretaría de Salud instrumentó un operativo de reforzamiento para la prevención y control del vector y acciones de promoción de la salud, a fin de controlar la transmisión de esta enfermedad, aseguró la doctora Mercedes Juan, Secretaria de Salud.El virus del Chikungunya es de baja letalidad, sin embargo la enfermedad resulta muy discapacitante por los efectos que provoca en los pacientes como fiebre y dolor en las articulaciones, dolor muscular, dolor de cabeza, náuseas, fatiga y erupción cutánea.
Datos de la Organización Mundial de la Salud indican que el dolor articular es a menudo muy debilitante, pero por lo general dura unos pocos días o puede prolongarse a semanas.
La mayoría de los pacientes se recuperan completamente aunque la enfermedad no tiene cura, pero en algunos casos el dolor en las articulaciones puede persistir durante varios meses, o incluso años.
La Secretaria de Salud mencionó que México blindó su sistema sanitario, consolidando servicios de salud capaces de resistir y responder ante el impacto de los diversos cambios del entorno, así como de las nuevas necesidades de salud, nacionales e internacionales.
Finalmente dijo que para hacer frente de forma efectiva a las enfermedades emergentes y a los padecimientos derivados del nuevo perfil demográfico y epidemiológico, se requiere de sistemas de salud sólidos y fuertes que brinden una respuesta efectiva y oportuna a la población.