Expertos buscan extender la vacunación hacia otras edades de la vida y promover un envejecimiento saludable y activo. “El Informe Mundial sobre el Envejecimiento y la Salud define el envejecimiento saludable como el proceso de fomentar y mantener la capacidad funcional que permite el bienestar en la vejez [2], por ello la vacunación puede contribuir, en buena medida, a promover un envejecimiento saludable, principalmente porque previene enfermedades transmisibles y contribuye a estar en mejores condiciones para hacerles frente”, doctora Martha Cecilia Guerrero Almeida, especialista en medicina interna e infectología.
Expertos nacionales de diversas especialidades anunciaron la creación del primer Consenso Mexicano de Vacunación en el Adulto, iniciativa que promueve la cultura de vacunación entre los adultos mexicanos para promover un envejecimiento activo, saludable y, por ende, con calidad de vida.“Es bien sabido que uno de los puntos primordiales de apoyo en la salud pública es la vacunación, que en México satisfactoriamente alcanza coberturas superiores a los estándares internacionales, mientras que otros países registran un rezago al cubrir tan sólo de 30 a 40%”, explicó el doctor Luis Miguel Gutiérrez Robledo, director general fundador del Instituto Nacional de Geriatría.
Respecto de la situación de la vacunación de adultos en México, el doctor Gutiérrez destacó que “actualmente tenemos el reto de establecer la aplicación sistemática de todas las vacunas disponibles, pues entre la población, y aún entre muchos profesionales de la salud, prevalece la idea de que la vacunación corresponde únicamente a la etapa de la infancia, pero es igualmente necesaria a lo largo de todas las etapas de la vida”.
Generar esta cultura de vacunación es la finalidad de la reunión de especialistas que “consistió en trabajar apuntando a 3 objetivos centrales: revisar la información disponible respecto a los lineamientos de vacunación a lo largo del curso de la vida, con énfasis en las nuevas vacunas; para definir los grupos prioritarios para vacunar, de acuerdo con sus factores de riesgo, establecer las recomendaciones y contribuir así al esfuerzo de la promoción de un envejecimiento saludable”, indicó el doctor Gutiérrez Robledo.
Otra de las conclusiones de las mesas de trabajo fue que “para ser verdaderamente efectivos debemos ofrecer las oportunidades de vacunación con una perspectiva de curso de vida, iniciando la vacunación que pretende evitar padecimientos infecciosos en la vejez, desde más temprano en la vida adulta, para obtener un mejor resultado al final, por ello integramos no sólo a geriatras, sino a especialistas de otras áreas”, refirió.
Entre los hallazgos del Consenso está el hecho de que “60% de las personas entre los 20 y 59 años de edad no cuentan con un esquema de vacunación completo, esto es: solamente 4 de cada 10 mexicanos adultos en edad media de la vida se vacunan sistemáticamente, por ello es claro que tenemos un área de oportunidad significativa para reducir la mortalidad, la morbilidad y la discapacidad catastrófica en la vejez”, advirtió el especialista en geriatría.
Desatender los esquemas de vacunación puede tener consecuencias fatales. “No recibir vacunas con oportunidad durante la edad adulta contribuye al exceso de mortalidad, no sólo por enfermedades infecciosas, sino también probablemente por enfermedades isquémicas, donde las respuestas inflamatorias desencadenadas por la influenza o la neumonía, pueden resultar en afecciones vasculares. Incluso se les relaciona con eventos de tipo infarto. Las vacunas protegen directa e indirectamente y además, por ejemplo en el caso de la vacuna contra el Herpes Zoster contribuyen a mantener la calidad de vida”, afirmó el doctor Gutiérrez.
En su oportunidad, la doctora Flor María de Guadalupe Ávila Fematt, directora de Enseñanza y Divulgación del Instituto Nacional de Geriatría, aseguró que “entre los países integrantes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México es el que tiene mayor cobertura contra la influenza, uno de nuestros objetivos es incrementar la cobertura para otras enfermedades y proteger a los adultos y adultos mayores”, adelantó.
“Es imperativo proteger a los adultos contra enfermedades tales como, tosferina, tétanos, hepatitis B, herpes zoster, influenza, enfermedad por meningococo, neumococo y por el virus del papiloma humano (VPH), entre otras como dengue y difteria. Algunas de ellas son mortales y otras dejan secuelas incapacitantes, que impactan la calidad de vida de los pacientes”, expresó.
“Para construir este consenso ha sido fundamental como una de las ideas centrales la perspectiva de curso de vida, así como los determinantes que influyen en la vacunación, la priorización de las vacunas y éstas como elemento articulador del sistema”, aseguró la doctora Ávila.
Respecto de las razones por las que los adultos no se vacunan en México, la especialista mencionó que “en parte es porque los equipos de salud y los médicos no invitamos a la población para que se vacune, por ello es importante reforzar esta invitación para así prevenir –más allá de la enfermedad– la discapacidad y otras complicaciones”, acotó.
“La buena noticia es que el Consenso, encabezado por el Instituto Nacional de Geriatría y más de 100 especialistas de toda la República, será de gran utilidad para difundir entre el gremio médico nuestro deber de fomentar y recomendar la vacunación en los pacientes para generar un beneficio que, a futuro, permitirá envejecer de manera saludable y con calidad de vida”, destacó la doctora Ávila Fematt.
La doctora Guerrero Almeida, informó que “esta estrategia social y de salud permitirá maximizar los beneficios de los programas de vacunación en la población, que han demostrado a lo largo del tiempo ser un apoyo para reducir la carga de enfermedades infectocontagiosas”, aseguró.
“Con lo anterior, se genera un ahorro económico considerable, pues se evitan gastos en consultas, medicamentos, hospitalización, discapacidad, pérdida de días laborales y en casos extremos la muerte. Además estas enfermedades infectocontagiosas son ahora potencialmente más devastadoras ante un mundo globalizado y la vacunación ayudará a mejorar la calidad de vida de los adultos mayores”.
La doctora Guerrero Almeida aseguró que “mejorar los programas de vacunación en la población adulta y adulta mayor, representa una oportunidad de revisar en conjunto las acciones y servicios de salud dirigidos a esta población en específico, para así en forma más clara y sencilla poder explicarles que al realizar medidas preventivas que favorezcan el mejoramiento de su salud individual, estarán abonando a una mejor calidad de vida para ellos y la colectividad”.
Y finalmente explicó que “la importancia del Consenso se centrará en prevenir enfermedades que pueden afectar a la población adulta en México, y así evitar el resurgimiento de enfermedades prevenibles por vacunación al aplicar los refuerzos que ahora sabemos son necesarios para los adultos y adultos mayores [1]”, recomendó la especialista.
Referencias
- Hara M, Okada K, Yamaguchi Y, et al. Immunogenicity and safety after booster vaccination of diphtheria, tetanus, and acellular pertussis in young adults: an open randomized controlled trial in Japan. Clin Vacc Immunol. 2013;20(12):1799-1804.
- Informe Mundial sobre el Envejecimiento y la Salud. Ginebra: Organización Mundial de la Salud. Ginebra; 2015.