El abrazo hace del mundo un lugar más dulce.
Leo Buscaglia

Abre los brazos y tu corazón, para dar o para recibir un abrazo sanador

Llevaba meses inmersa en la peor crisis matrimonial de su vida. Sentía la soledad lacerándole el alma y el cuerpo. El mundo se veía color gris, tan opaco… Necesitaba tanto que él la mirara a los ojos. A veces sentía que estaba desapareciendo lentamente. Supo que era urgente el contacto con otra piel o moriría de tristeza. “Un masaje”, pensó. “Eso necesito.” Desafortunadamente, por el estado avanzado de su embarazo –estaba a escasos 2 meses de su fecha de parto-, en el spa le dijeron que no podían ofrecerle el servicio de masaje. Sintió que las piernas le flaqueaban… con lágrimas en los ojos, le suplicó a la masajista que le diera el servicio… “Aunque sea muy suavemente, aunque sea unos minutos.” La masajista se conmovió al darse cuenta en su mirada, del dolor que la inundaba, de la enorme necesidad que tenía de ese contacto. La abrazó cálidamente. Ella comenzó a llorar quedito. “Pasa, le dijo. Haremos un masaje muy suave sin ningún riesgo.”

Es probable que hubiera un riesgo en ese masaje, pero había un riesgo todavía mayor en no ofrecerle a esa mujer un poco de calor humano. El abrazo la salvó, el contacto humano, el calor de esas manos, le revivió el cuerpo, pero sobretodo el alma.

El abrazo es un gesto natural, instintivo, que no nos enseña nadie. Abrazamos a nuestros hijos apenas nacen porque sentimos necesidad de hacerlo. Abrazamos a otro cuando nos faltan palabras para consolarlo o expresarle nuestros sentimientos. Buscamos el abrazo de alguien cuando nos rebasan las emociones. Un abrazo, pues, es un regalo que siempre se agradece. Y además, es bien sabido, que tiene beneficios para la mente, el cuerpo, las emociones y el espíritu. ¿Qué más se puede pedir?

De acuerdo a la Dra. Cécile Katchadourina, creadora de la Terapia de Vinculación que combina la terapia del abrazo con las constelaciones familiares, los beneficios de un abrazo son de índole física, mental, emocional y espiritual. Su impacto es tal, que hoy en día abrazar es parte de una terapia altamente eficaz y bien reconocida en todo el mundo: la abrazoterapia, que consiste en reconocer la importancia vital de amar y sentirnos amados.

Algunos de los beneficios de la abrazoterapia son:
-Nos rescatan de la soledad y el aislamiento.
-Guían el auto conocimiento potenciando la autoestima.
-Facilitan los desbloqueos físicos y emocionales.
-Nos permiten vivenciar la integración de cuerpo, mente y emociones.
-Nos ejercitan en la empatía.
-Nos sitúan plenamente en el “Aquí y el Ahora”.
-Favorecen la comunicación afectiva con nosotros y con el otro.
-Estimulan la gratitud.
-Despiertan la creatividad.
-Impulsan a una actitud pro-activa en la vida.
-Conectan con la intuición.
-Favorecen el entrenamiento de respuestas asertivas.
-Devuelven la ilusión, la alegría y el buen humor, puesto que la risa es su fiel
compañera.
-Le brinda reconocimiento y protección a nuestro «niño interior».
-Potencia la resiliencia.*

Con tantos beneficios literalmente al alcance de la mano, ¿qué estamos esperando para abrazarnos? Abre los brazos y tu corazón, para dar o para recibir un abrazo sanador.

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El abrazo que transforma el amor de la pareja
Autor: Cécile Katchdourina
Editorial Pax México

*Lia Barbery, “Abrazoterapia”, en En buenas manos (www.enbuenasmanos.com)