Transtornos Mentales
Casi 16% de la población mexicana padece algún tipo de trastorno mental severo, como depresión, trastornos bipolares o del sueño, ataques de angustia y ansiedad, bulimia y anorexia, o adicciones a sustancias, entre otros.
Sin embargo, menos de 3% de estos pacientes lleva un tratamiento psicológico, pues sólo un reducido porcentaje acude a supervisión psicológica cuando padece de algún trastorno emocional, “porque lo menosprecia y califica de malestar pasajero”, advierte el Dr. José de Jesús González Núñez, presidente honorario del Instituto de Investigaciones en Psicología Clínica y Social (IIPCS).
Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que el 10% del presupuesto oficial se emplee en gastos para la salud mental, en México sólo se destina el 0.85%, además de que sólo se cuenta con 10 psicólogos clínicos por cada 100 mil habitantes, déficit que se suma al subdiagnóstico de enfermedades mentales en este tipo de pacientes.
Las mujeres en México son más propensas a sufrir de depresión como estado de enfermedad mental severa, relación que se estima de dos mujeres deprimidas por cada varón, en tanto que trastornos como los de ansiedad y angustia se consideran frecuentes y que afectan por igual al 7% de la población.
Con todo, “existen nuevos trastornos que van a la alza, sobre todo en adolescentes y niños, por ejemplo, 5% de los niños que cursan primaria padecen del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), en tanto que un poco más del 1.5% padecen bulimia y anorexia, sobre todo mujeres adolescentes mayores de 12 años”, afirma.
Por lo que toca al punto mortal de las depresiones que es el suicidio, la OMS establece que ese punto final de la vida como consecuencia de las enfermedades mentales, ocupa el quinto lugar en la estadística fatal de los jóvenes a nivel mundial y el décimo entre las causas de muerte de la juventud mexicana.
La mayoría de las personas que acuden a un tratamiento psicológico en México, son de nivel socioeconómico medio, entre 25 y 40 años de edad, entre quienes predominan las mujeres, “posiblemente porque ellas si reconocen su depresión, soledad o pérdida de pareja y los problemas con los hijos.
“En cambio, los hombres llegan a terapia debido a problemas en su trabajo o de productividad; incluso por deseos de quitarse la vida porque no se sienten reconocidos o capaces socialmente”.
De acuerdo a estadísticas del IIPCS, en los años recientes se incrementaron los tratamientos psicológicos para niños, “quienes acuden en su mayoría por bajas calificaciones escolares, TDAH, así como en menor medida por casos de maltrato o abuso sexual, debido a que estos temas siguen siendo tabú dentro de las familias mexicanas y prefieren ocultarlos”, afirmó el especialista.
“En los próximos años seguirá aumentando la demanda de atención infantil, debido a que nuestros niños se sienten solos, ya que los padres trabajan todo el día, sus niñeras son los videojuegos y la televisión, lo cual crea que se sientan más solos o con incapacidades para relacionarse con sus semejantes en el futuro”.
