¿Vas frecuentemente a revisión médica? ¿En tu casa te tomas periódicamente la presión arterial? Si has respondido negativamente a dichas preguntas es muy probable que puedas estar sufriendo Hipertensión Arterial y no lo sepas.
La Hipertensión Arterial es un síndrome que se caracteriza por el aumento continuo de la presión arterial a niveles superiores a 140/90 mmHg; es un padecimiento que no da síntomas durante mucho tiempo, incluso años, por lo que es conocida como la “Enfermedad Silenciosa” y afecta a más del 30% de la población, de los cuales, sólo la mitad de ellos sabe que la padece; además, la Hipertensión Arterial es una de las enfermedades que representa la primera causa de muerte entre los mexicanos y se encuentra estrechamente relacionada con el Sobrepeso y la Obesidad.
El costo directo estimado que representó la atención médica de las enfermedades atribuibles al sobrepeso y la obesidad representó la tercera parte del gasto público federal en servicios de salud durante 2000-2008 y se ha proyectado para los próximos años (2010–2020) que dicho gasto se incremente dramáticamente y pueda llegar a consumir hasta el 79.5% del mismo. Es importante resaltar que menos de la mitad de los pacientes que se conocen hipertensos toman algún medicamento, y de éstos, sólo el 20% le da continuidad.
Por lo anterior, de acuerdo al Segundo Informe de Gobierno, se han concentrado esfuerzos gubernamentales para la atención de pacientes de alto riesgo lo que ha resultado en un control metabólico al 72% de los pacientes con hipertensión arterial que se han detectado en las Unidades de Especialidades Médicas de Enfermedades Crónicas.
Cuando el padecimiento no es tratado puede desencadenar complicaciones severas como un infarto de miocardio, una hemorragia o trombosis cerebral. Las primeras consecuencias de la hipertensión las sufren las arterias, que se endurecen a medida que soportan la presión arterial alta de forma continua, se hacen más gruesas y puede verse dificultado al paso de sangre, lo que se conoce con el nombre de arterosclerosis.
La Hipertensión Arterial no puede curarse en la mayoría de los casos, pero puede controlarse.
En general debe seguirse un tratamiento regular de por vida para bajar la presión y mantenerla estable; uno de los fármacos más recetados por los médicos es el valsartán, comúnmente conocido por la marca Acavexal que comercializa Aspen Labs en México. Este medicamento es un antihipertensivo que dilata las paredes de las arterias causando la reducción de la presión arterial.
Por otro lado, el médico recomendará cambios en los hábitos del paciente como una dieta para perder peso y medidas como no abusar del consumo de sal, hacer ejercicio con regularidad, reducir la ingesta de alcohol y café, así como dejar de fumar.
Finalmente, es fundamental la visita frecuente al médico, quien podrá diagnosticar e indicar el tratamiento adecuado en caso de que sufras Hipertensión Arterial; asimismo, es muy importante evitar la automedicación y recordar que la prevención siempre es la mejor medicina.