Con seguridad existen muchas personas que piensan que tener bichos en el aparato digestivo es cosa del pasado o que es un padecimiento característico de ciertos grupos de la sociedad. ¡Gran error!, ya que hoy en día la parasitosis intestinal constituye un serio problema de salud pública a nivel mundial y nuestro país no es la excepción.
De acuerdo con los especialistas en el tema, los parásitos intestinales pueden afectar a cualquier persona, es decir, éstos no respetan edad, sexo ni condición social.
En la República Mexicana este padecimiento es una de las principales causas de consulta, ya que datos emitidos por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubican a este padecimiento dentro de las cinco primeras causas de consulta en las Unidades Médico Familiares (UMF), en donde en un solo día se atienden hasta 200 pacientes, de los cuales el 80% pueden presentar síntomas de parasitosis.
Asimismo, de acuerdo con el reporte de la Dirección de Vigilancia Epidemiológica de la Secretaría de Salud, la prevalencia o porcentaje de personas que albergan amibas, lombrices y otros bichos en sus intestinos es hasta del 70 por ciento en algunas zonas del país.
El número de infectados con parasitosis está determinado, principalmente, por la diversidad climática, socioeconómica y la calidad de la infraestructura tanto de servicios de agua potable como de drenaje en cada localidad.
Cómo se transmiten
El Dr. Gerardo Casanova, médico infectólogo, explica que los huevecillos o quistes de los parásitos intestinales se encuentran en la materia fecal de los humanos que al contaminar el suelo, agua, alimentos y objetos de uso cotidiano, como teléfonos, pasamos del transporte público, la manija de una puerta, un lápiz, entre otros, provocan el ciclo de contagio.
Síntomas
En la mayoría de los casos los síntomas de las parasitosis intestinales son muy leves e incluso nulos, no obstante existen algunos bichos que provocan infecciones graves.
Es necesario saber que la sintomatología puede variar dependiendo de la localización y del tipo de parásito, y que no siempre se manifiestan todas las molestias, es decir, basta con presentar alguna de ellas para sospechar la presencia de cualquiera de estos organismos.
De acuerdo con el Dr. Casanova los síntomas más frecuentes son: dolor abdominal, inflamación, gases, estreñimiento alternado con diarrea ocasional, sensación de querer ir al baño de forma frecuente, falta de apetito, pérdida de peso y debilidad.
Cabe resaltar que los parásitos intestinales pueden viajar a través del torrente sanguíneo y dañar de forma severa al hígado, cerebro, vesícula biliar y pulmones causando anemia, desnutrición, enfermedades estomacales y en casos extremos la muerte.
En este sentido existen estudios que demuestran que dentro de las enfermedades parasitarias del aparato digestivo, la amibiasis es una de las más contagiosas, que afecta principalmente a niños y adultos mayores, siendo más letal en estos extremos de la vida.
Protégete
Ante esta gran problemática la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que todos los miembros de la familia se desparasiten cada seis meses.
En este sentido, una persona que se desparasita evita poner en riesgo su salud y la de su familia, ya que tanto amibas como lombrices pueden frenar el desarrollo físico e intelectual de los niños y en los adultos son causa de bajo rendimiento diario y laboral.
Fuente
• Dr. Gerardo Casanova, médico infectólogo.
• www.ssa.gob.mx
• www.vermox.com