El ser hombre, mujer o persona transgénero ejerce efectos no sólo en la anatomía y en la conducta reproductiva, sino también en los mecanismos inmunes, en la percepción del dolor, en la dieta, en la ocupación, en las conductas sociales y en la exposición a riesgos. Un buen ejemplo de ello es el dimorfismo sexual en la obesidad.
Durante los últimos años se ha publicado un cierto número de trabajos que revisan el efecto del género en diversos aspectos que conciernen a las enfermedades mentales. Uno de ellos abordó las diferencias observadas en el trastorno obsesivo compulsivo (TOC).
Los autores, partiendo del concepto de que el TOC es un padecimiento heterogéneo y con muchos subtipos, hicieron una revisión de 63 trabajos publicados sobre el tema para determinar las diferencias por género en aspectos clínicos, genéticos y familiares. Encontraron que, a diferencia de las mujeres, los hombres con TOC eran predominantemente solteros, iniciaban la enfermedad en etapas más tempranas de la vida y tendían más a un curso crónico. Además, una mayor comorbilidad con los tics y con el abuso de sustancias.
Las mujeres presentaban más síntomas de tipo limpieza y contaminación y mayor comorbilidad con trastornos de la conducta alimentaria. Si bien no se puede llegar a una conclusión definitiva, los autores piensan que el género juega un papel importante en la enfermedad y que se debe considerar en la implementación del diagnóstico y del tratamiento.
Otro estudio corresponde a la revisión de las diferencias observadas en roedores entre machos y hembras sobre modelos animales de depresión, de sintomatología ansiosa, de aprendizaje y memoria y de respuesta al estrés.
Dependiendo de la naturaleza del estresor, las hembras y los machos presentaron respuestas diferentes en las medidas de la actividad hipotálamo-pituitaria-adrenal inducida por estrés. También se encontraron diferencias en la respuesta a los psicotrópicos, lo que indica una posible diferencia en la actividad de los neurotransmisores y en la expresión de los receptores y los transportadores.
El impacto del ciclo de los estrógenos sobre el comportamiento y la neuroquímica, el crecimiento dendrítico y la respuesta a fármacos se estudió por medio de la eliminación de los ovarios. Los autores consideran que estas diferencias se pueden extrapolar a los humanos, por lo que deberán tomarse en consideración en el diseño de los estudios clínicos.
Referencias
- Información Clínica proporcionada por boletines del Instituto Nacional de Psiquiatría. (VOL. 23, NÚMERO 10, OCTUBRE 2012)