Estamos en un momento de la historia en el que todas las sociedades tienen la capacidad de visualizarse a sí mismas. Fenómenos como la globalización, permiten conocer el estilo de vida de todas las personas alrededor del mundo. Esta visualización nos ha mostrado la violencia que existe hacia la mujer.
La resolución 49.25 de la Asamblea Mundial de la Salud, proclama que la violencia contra la mujer es un tema de Salud Pública y de Derechos Humanos, por lo que exhorta a los gobiernos a la acción.
Enfrentan múltiples tipos de discriminación y violencia
El 17 de diciembre de 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas, designó al 25 de noviembre como Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la mujer. Este día se ha convertido en uno de los más importantes de la agenda feminista internacional pues comprende, además, una campaña de 16 días de acciones contra la violencia.
Las mujeres hoy en día enfrentan múltiples tipos de discriminación y violencia en diversos ámbitos de la sociedad. Ya sea como madres, esposas, compañeras de vida, hermanas, amigas, primas, sobrinas, todas pueden llegar a ser víctimas.
El Cuarto Informe Anual DAVM 2023 de la Secretaría de las Mujeres, muestra que en la Ciudad de México, se registraron 48 feminicidios y 103 personas fueron vinculadas a proceso. Por otro lado, de acuerdo con los Centro de Justicia para las Mujeres (CJM), la violencia física se reporta en 33.2% de los casos, seguida de la violencia psicológica con un 24.8%.
Debemos reconocer la realidad de la violencia
Es por esto que debemos reconocer y apropiarnos de la mejor manera de este proceso que vivimos. Un cambio de conciencia que permite cuestionarnos las formas de convivencia y respeto que hay entre todas la hebras de este tejido llamado sociedad.
En este sentido, la Organización Mundial de la Salud estima que una de cada 3 mujeres en el mundo ha sufrido violencia física y/o sexual de pareja o violencia sexual por terceros en algún momento de su vida. Un dato que cabe destacar es que la mayor parte de las veces, el agresor es la pareja o algún miembro cercano de la familia.
Sobre la violencia familiar
Un estudio hecho por la Universidad de Chile menciona que la violencia se produce con mayor frecuencia desde el seno familiar. Atraviesa todas las líneas raciales étnicas, religiosas, educativas y socioeconómicas y en la mayoría de los casos es una situación progresiva que se reconoce como un serio problema de salud pública.
La violencia doméstica puede ser una de las expresiones más radicales de discriminación y dominación hacia la mujer. Es en esta relación que las jerarquías y el poder que ostentan los hombres, sólo por ser hombres, someten a la mujer y la subordinan.
Un ciclo que puede parar: ubiquemos el síndrome del maltrato el cual reconoce tres fases
Existe una descripción sobre el síndrome del maltrato. En ella se reconocen tres fases que se repiten de forma continuada en la gran mayoría de los casos. Este proceso es conocido como el ciclo de la violencia.
El ciclo inicia con la tensión, una sensación de enojo provocada por alguna situación que pone de manifiesto una agresividad latente. Se presentan agresiones verbales y físicas de carácter moderado con un grado creciente de tensión.
Continúa con la agresión aguda. Una descarga sin control de tensiones acumuladas que se expresan con agresiones físicas directas. Entre ellas destacan los abusos sexuales, amenazas, golpes, incluso el uso de armas de algún tipo.
Finalmente, el ciclo se cierra con la fase de reconciliación. Aquí el abusador puede negar los actos de violencia, pedir perdón y prometer que nunca más se repetirá. Si no se actúa pronto, este ciclo agresor-agredido, pude desencadenar en un ejercicio de poder más profundo en la relación, ya sea laboral, personal, o de pareja.
Gobierno federal lanza campaña contra la violencia hacia la mujer
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la mujer, el gobierno de México, a través de la Secretaría de las Mujeres, lanzó una campaña permanente destinada a erradicar las agresiones hacia las mujeres.
Bajo el lema «Es Tiempo De Mujeres Sin Violencia«, esta iniciativa busca sensibilizar a la sociedad sobre la necesidad de transformar las conductas cotidianas que perpetúan la violencia de género y crear un ambiente donde mujeres y hombres convivan libres de agresiones.
La campaña tiene el propósito de «construir un país donde todos los individuos puedan vivir sin violencia, sin importar su género». Destacando que muchas de las conductas que se consideran «normales» en la sociedad, en realidad, son parte de un sistema estructural de violencia.
La campaña cuenta con 10 compromisos clave, entre los que se destacan: la coordinación entre los diferentes niveles de gobierno, la capacitación de servidores públicos, la atención adecuada a mujeres en situación de violencia y la implementación de políticas preventivas en espacios educativos.
Además, se fomentará la creación de fiscalías especializadas en violencia de género y la promoción de una cultura de respeto hacia las mujeres en todos los ámbitos.