Casi todos los trabajos que desempeñamos en la actualidad implican que adoptemos posturas erróneas durante horas y horas lo que puede llegar a producir alguna molestia en nuestro cuerpo. Tener un dolor constante en la espalda es un padecimiento que afecta de manera directa la calidad de vida de quien lo presenta. En un principio puede ser tolerable pero puede convertirse en discapacitante.
La columna vertebral baja o lumbar es una estructura delicada que conecta la parte superior del cuerpo (torax y brazos) a la parte inferior del cuerpo (pelvis y piernas).1 Permanecer largas horas frente a la computadora, levantar objetos pesados y utilizar tacones altos son sólo algunas de las actividades que afectan directamente a nuestra espalda. Los neurocirujanos invierten el 70% de su tiempo tratando padecimientos de la espina dorsal.1
La mayoría de los casos que presentan dolor de espalda baja no son serios y responden a tratamientos simples pero cuando este dolor está acompañado por la degeneración de los discos cartilaginosos que amortiguan el impacto entre las vértebras se produce el llamado dolor neuropático caracterizado por hormigueo, calambres y sensación quemante. En este momento se debe usar un anti-inflamatorio y un neuromodulador para el dolor neuropático como es el caso de Pregabalina, una nueva molécula desarrollada por Pfizer, capaz de reducir el dolor en el 52.5% de los pacientes con dolor neuropático, el 66.7% de estos logran ver disminuido su dolor en un 30% y del total de las personas tratadas el 80% presentan alguna mejoría2.
Factores de riesgo de dolor de espalda baja
Compresión de un nervio.
Daños en discos intervertebrales.
Obesidad.
Sedentarismo.
Malas y prolongadas posturas.
Vestuario (tacones altos).
Factores psico-emocionales (ansiedad, depresión, angustia y estrés).
Levantamientos y traslado de peso.
Movimientos o esfuerzos bruscos.
Accidentes.
Dolores Musculares.
Causas
Degeneración del disco.
Disco herniado (ruptura).
Esguince o torcedura de los músculos o ligamentos en el área.
Fracturas.
Pruebas de diagnóstico
Rayos X.
Tomografía Computarizada.
Resonancia Magnética.
Pruebas de Sangre.
Exámenes de Orina.
Manda tus dudas a salud[arroba]plenilunia[punto]com