¿Cuántas veces no hemos escuchado que hacer ejercicio es vital para un buen estado de salud? Aunque es indispensable mantenernos en forma también es importante hacerlo con cuidado, ya que el incremento del ejercicio sin la orientación o las condiciones adecuadas puede provocar lesiones y con ellas, experimentar dolor.

Hay que tomar en cuenta que el frío también puede repercutir en la salud de los músculos, ya que por las condiciones climáticas los músculos pierden calor, lo que hace que estén más rígidos y tengan una menor movilidad y si no se calienta adecuadamente se pueden presentar lesiones.

Existen diferentes tipos de dolor que los especialistas clasifican dependiendo la intensidad y duración en:

• Dolor agudo, y
• Dolor crónico.

Dolor agudo

El dolor agudo, se manifiesta como una respuesta de corta duración ante circunstancias de algún trauma como esguinces, desgarres, fracturas o heridas, también se presenta después de una cirugía o por enfermedades como lumbalgia aguda y traumatismos. Dura menos de un mes, aunque podría prolongarse hasta los 6 meses.

La permanencia del dolor depende en gran medida del diagnóstico oportuno y el tratamiento que el especialista recomiende.

Muchas veces las personas no acuden al médico debido a que creen que la molestia pasará pronto, por lo que es importante hacer conciencia sobre la necesidad de acudir al médico ante cualquier malestar de este tipo y que la gente sepa que se puede vivir sin dolor.

Para lograr esto acaban de lanzar un sitio web que se llama “Más vida, menos dolor”, en donde se encuentra información sobre los tipos de dolor, sus causas más comunes y orientación general sobre instituciones para encontrar especialistas que los ayudarán para que logren tener una mejor calidad de vida.

De acuerdo con el tipo de dolor que diagnostique el especialista, el tratamiento debe ser integral, en el caso de las lesiones como esguinces o desgarres, normalmente se acompaña de inmovilidad en la parte de la lesión y en algunos casos fisioterapia.