Por Yuriria Pavón*. Envejecer es un proceso natural y paulatino que vive todo ser vivo y es irreversible, por ello, resulta importante prevenir y prepararse para llegar a esta etapa de la vida.
Si bien lo pueden vivir con abuelos, papás y gente mayor, la relevancia de entender este proceso hará que la sociedad participe activamente en la calidad de vida de ellos y los demás.
Nuestra sociedad está envejeciendo
Para muestra basta un botón, de acuerdo con datos del INEGI, en el año 2020, el 11% de la población en México superaba los 65 años. Los retos que se presentan como sociedad son enormes, no se puede esperar a que las políticas públicas y los programas sociales sean los únicos que vean por el bienestar de los adultos mayores.
Y es que ante una esperanza de vida más larga, es de vital importancia tomar conciencia para que de forma individual y como familia se vaya trabajando para una vejez digna donde cada persona adulta mayor tenga derecho a una buena calidad de vida.
Se seguirá envejeciendo y la diferencia será la autonomía que cada persona tenga para poder ser autosuficiente en las necesidades básicas como: comer, vestirse y poder caminar.
Valerse por sí mismos es clave
El desafío se presenta cuando no se puede andar y valerse por sí mismo, sumando otros síntomas y afectaciones de salud, por eso es importante prevenir y llevar un control si es que ya se presentan estos malestares.
Prepararnos para una vejez saludable
La responsabilidad de cómo se envejece es nada más de ti, cómo te cuidas y qué haces, no importa que tengas 20, 30 o 40 años, tener conciencia del cuerpo, qué comes física, mental y espiritualmente porque todo eso se acumula en el cuerpo y depende de tus hábitos es que tendrás una mejor vejez.
Todos tienen derechos y obligaciones y como ciudadano del mundo debería existir un compromiso para no ser una carga para la familia y la sociedad una vez llegado el momento, si hay algo inesperado estar lo mejor preparado para la eventualidad.
Envejecer exitosamente
Envejecer exitosamente lleva disciplina y compromiso y se debe comenzar con lo básico, la salud física, si has llegado a esta etapa de la vida y ya tienes una lista de padecimientos, no te asustes y toma manos a la obra, busca tener el control de tus medicamentos y valora qué cambios en tu estilo de vida puedes modificar para mejorar los síntomas.
Otra parte esencial de crecer es mantener la salud mental sana, si bien se viven muchos duelos de personas y situaciones en esta etapa, es importante reconocer hasta cuando tienes el poder de cambiar el estado de ánimo y hasta cuando no y estar dispuesto en todo momento a acudir con un especialista que te ayude y acompañe en el proceso.
Vida social activa
Se ha comprobado que tener una vida social activa ayuda al lento envejecimiento de las personas, habrá gente que sea de personalidad reservada pero siempre hay algo que se pueda hacer y sumar para tener contacto con más gente con los mismos intereses que tú: aprender a pintar, coser, bordar, jugar ajedrez, siempre habrá algo nuevo que te ayuda a hacer nuevos amigos o conexiones sociales, así como a generar nuevas sinapsis en el cerebro para ralentizar el deterioro cognitivo.
Sabiduría en acción y movimiento
Para abrir camino a una vejez exitosa nace «Sabiduría en acción y movimiento«, un espacio de acompañamiento para adultos mayores, terapia ocupacional personalizada, desde clases de computación, tecnología para aprender a comunicarte con quienes más amas, gimnasia cerebral, juegos de destreza mental y gimnasia física para que el cuerpo haga músculo y esa fuerza les ayude a no dejar de moverse.
@sabiduria_acción_y_movimiento.
*Yuriria Pavón. Gerontóloga en formación por el Instituto Nacional de Tanatología, A.C. Móvil: 55 2702 6763.