El cáncer de estómago es un tipo de cáncer de muy rápido crecimiento entre personas cada vez más jóvenes.
Aunque 68 años es la edad promedio de diagnóstico, se está observando que el cáncer de estómago se está presentando en personas que están en sus 60, 50 e incluso en sus 40 años de edad.
Aunque todo el mundo tiene problemas gastrointestinales de vez en cuando, debemos ser conscientes cuando éstos no desaparecen con un tratamiento.
Si bien algunos casos de cáncer de estómago son de origen genético, muchos factores de riesgo se pueden controlar en colaboración con el médico.
La Dra. Anaum Maqsood, oncóloga gastrointestinal del Hospital Houston Methodist nos comparte cuatro consejos para reducir el riesgo de cáncer de estómago y detectarlo a tiempo:
Conoce los síntomas
El cáncer de estómago temprano rara vez causa síntomas. A largo plazo, la inflamación y los ácidos digestivos que ingresan a la garganta causan cambios en las células que pueden provocar cáncer gastrointestinal.
Notar los signos sutiles del cáncer de estómago y hablar con un médico sobre tus síntomas puede ayudar a detectar la enfermedad a tiempo, cuando es más tratable.
Estos son los 10 síntomas del cáncer de estómago que nunca debes ignorar:
- Hinchazón después de comer
- Sangre en las heces, que pueden verse de color marrón oscuro o negro
- Diarrea o estreñimiento
- Indigestión, acidez estomacal o enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE)
- Pérdida de apetito
- Náuseas o vómitos
- Dolor o malestar en el abdomen
- Sensación de comida atascada en la garganta
- Hinchazón o acumulación de líquido en el abdomen
- Pérdida de peso inexplicable. Debilidad y fatiga
Sin embargo, estos síntomas pueden estar asociados a otras enfermedades. Habla con un médico de inmediato si los síntomas gastrointestinales no se resuelven con un tratamiento de venta libre.
Conoce tus factores de riesgo
Muchos factores de riesgo están bajo tu control; por ejemplo, es imprescindible evitar:
- Dieta alta en alimentos salados, ahumados, verduras en escabeche o alimentos que contienen nitratos y nitritos.
- Consumo de alcohol o tabaco.
- Sobrepeso u obesidad.
La infección por la bacteria Helicobacter pylori (H. pylori) también puede causar cáncer de estómago. La H. pylori se propaga a través de alimentos y agua contaminados o por contacto con sangre, vómito o heces infectadas.
Estas afecciones también aumentan el riesgo
- Esófago de Barrett, una afección en la que el revestimiento del esófago se daña por la enfermedad por reflujo gastroesofágico.
- Acidez estomacal crónica que dura más de ocho semanas
- Antecedentes familiares de cáncer de estómago
- Anemia perniciosa, cuando el sistema inmunitario destruye las células del revestimiento del estómago.
- Sangre tipo A, que algunos estudios han demostrado que aumenta el riesgo de cáncer de estómago por razones que aún se están investigando.
- Antecedentes de cirugía de estómago o pólipos estomacales.
- Exposición ambiental, como trabajar en las industrias del carbón o del caucho.
Si presentas alguno de estos factores, habla con tu médico para evaluar si pudieras tener un alto riesgo de cáncer de estómago.
Hazte la prueba de detección si estás en alto riesgo
La colonoscopia a partir de los 45 años, o antes, es el examen para detectar el cáncer de colon, o prevenirlo, mediante la extirpación de pólipos sospechosos.
Si bien no hay pruebas de detección de estómago para el cáncer de estómago para la población general, los pacientes con factores de riesgo tienen opciones de diagnóstico.
Un gastroenterólogo puede recomendarte que te hagas exámenes o procedimientos mínimamente invasivos para identificar tu riesgo y/o diagnosticar cáncer de estómago.
Crea y mantén un estilo de vida saludable
“Se ha vuelto muy común que cada vez más personas tengan síntomas de indigestión, acidez estomacal y enfermedad por reflujo ácido debido a nuestras dietas, falta de ejercicio, estilos de vida y aumento de los índices de masa corporal”, refiere la Dra. Maqsood.
Algunas recomendaciones para reducir tu riesgo de cáncer de estómago son las siguientes:
- Come más frutas y verduras.
- Come menos alimentos procesados. Los alimentos envasados con largas listas de ingredientes suelen ser menos saludables que los cereales integrales, las frutas y verduras y las proteínas magras.
- Haz ejercicio regularmente. Camina, trota, anda en bicicleta, nada o busca una forma de ejercicio cardiovascular que puedas disfrutar durante 30 minutos al día, al menos cinco días a la semana.
La prevención del cáncer de estómago comienza con reconocer tu riesgo personal y escuchar a tu cuerpo. Habla con tu médico sobre tus antecedentes médicos familiares y tu estilo de vida para comprender tus probabilidades de desarrollar cáncer de estómago y para detectarlo.