Embarazada y con las emociones a flor de piel
Hace una década todavía muchas mujeres se sentían realizadas al tener hijos. En la actualidad ya no es una prioridad, pues preferimos tenerlos después de haber cubierto otras necesidades como tener una profesión, viajar o hablar idiomas. Y aunque no se mencione así, el embarazo involucra a todo el sistema familiar, por lo que en esta etapa la mujer se ve obligada a ajustarse a los cambios emocionales, psicológicos, sociales y económicos que conlleva un embarazo.
En consulta privada con mujeres embarazadas, es importante trabajar sus emociones debido a que la futura madre vive una crisis interna por sus cambios y ajustes bio-psico-sociales que la llevan indiscutiblemente a revalorar su vida en general. En la parte emocional, surgen una serie de cuestionamientos e inquietudes por su nueva condición de mamá:
-Sentimientos de incertidumbre: miedo a ser mamá y contrariedad por cómo equilibrar el amor de su pareja con el nuevo bebé y la familia.
-Experimenta altos niveles de estrés debido a las expectativas que se plantea sobre su desempeño: “¿Seré una buena madre?”. (más…)