Edulcorantes bajos en calorías, herramienta útil

Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 31 segundos

Frente al crecimiento sostenido de enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes tipo 2 y la hipertensión, los edulcorantes bajos en calorías o sin calorías se perfilan como una herramienta eficaz y segura para reducir la ingesta de azúcar sin renunciar al sabor dulce.

Sustitutos que ayudan a controlar el peso y la glucosa

Una reciente revisión publicada por The British Medical Journal —consultada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO)— señala que el uso de estos endulzantes alternativos mostró efectos positivos en la pérdida de peso, el Índice de Masa Corporal (IMC) y los niveles de glucemia. Sus beneficios los posicionan como una alternativa válida frente al azúcar tradicional, especialmente para personas con sobrepeso u obesidad que buscan mantener una alimentación más saludable sin perder el sabor que prefieren.

Ayudan al control del peso y enfermedades metabólicas- Imagen: cortesía.

La International Sweeteners Association también destaca que las personas con diabetes pueden incluir este tipo de edulcorantes dentro de una dieta equilibrada, sin poner en riesgo el control de la glucosa en sangre. Esta medida puede disminuir el consumo total de energía y azúcar, al tiempo que mejora la calidad de vida del paciente.

Evidencia científica respaldada por estudios clínicos

Un metaanálisis de 17 ensayos clínicos publicado en JAMA Network Open reveló que, en adultos con sobrepeso u obesidad, las bebidas endulzadas con sustitutos bajos en calorías son una estrategia efectiva a mediano plazo para reemplazar bebidas azucaradas. Los resultados también sugieren que estos productos pueden contribuir a la prevención de la diabetes tipo 2 en personas con riesgo elevado.

Además, los edulcorantes han sido ampliamente estudiados y cuentan con respaldo regulatorio internacional. Por ejemplo, en Canadá, autoridades sanitarias reconocen como seguros compuestos como aspartamo, sucralosa, eritritol, acesulfame de potasio y polioles (como sorbitol, maltitol y xilitol), siempre que se usen dentro de los límites establecidos por la normativa.

Azúcar en exceso: un riesgo latente

El uso de edulcorantes seguros toma especial relevancia si se considera que el exceso de azúcar sigue siendo un factor de riesgo asociado al desarrollo de obesidad, hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares y el avance global de la diabetes tipo 2.

En este contexto, los sustitutos del azúcar pueden formar parte de una estrategia nutricional más amplia, destinada a mitigar los efectos negativos del consumo elevado de calorías y azúcares añadidos en la dieta diaria.

Lejos de ser una moda, los edulcorantes bajos o sin calorías se consolidan como una herramienta científica y regulatoriamente avalada para mejorar la salud metabólica, favorecer la pérdida de peso y reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Su uso responsable, acompañado de una dieta equilibrada y asesoramiento profesional, representa una vía efectiva para mejorar el bienestar sin renunciar al sabor dulce.

- Advertisement -spot_img