Una alimentación saludable consiste también en medir las porciones: para los adultos, los alimentos se deben servir en un plato de 23 centímetros de diámetro y para los menores en uno de 19; ambos deben contener verduras, una cuarta parte comida de origen animal y el resto cereal o pasta, nos asegura Alma Belén Membrila Torres, nutrióloga del IMSS.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recomienda a la población, para las celebraciones de fin año, no consumir platillos típicos ricos en grasas, azúcares o condimentos, y sustituirlos por alimentos horneados, agua natural, tés sin azúcar y servir raciones adecuadas para adultos y menores.
Para las personas con diabetes o hipertensión, lo recomendable es que consuman raciones moderadas y privilegien la ensalada de verduras. “De esta forma se puede mantener el control de los niveles de glucosa durante las cenas”.
Destacó que es importante considerar si tiene alguna restricción médica o padece alguna de estas enfermedades para determinar si se pueden o no cenar algunos platillos en las festividades de fin de año.
Cuidado los niveles de azúcar
Alma Belén explicó que si la cena incluye un platillo como preparaciones de enchiladas o encirueladas, se sugiere elegir la primera. Esto debido a que el otro guisado incluye azúcar y puede afectar los niveles de glucosa después consumir los alimentos.
Grasas
Sugirió seleccionar, por ejemplo, arroz o un espagueti que no contenga mucha grasa o mayonesa, alguna verdura o fruta, a fin de mantener la saciedad hasta el próximo tiempo de comida.
Incluir semillas
Como colación vespertina, entre las 5 y 6 de la tarde, recomendó consumir algunas semillas como cacahuates, pistaches, entre otras. Esto para más tarde dar paso a la cena, la cual de preferencia debe ofrecer platillos bajos en calorías, grasas y azúcares.
La nutrióloga insistió en preferir para estas fechas de fin de año una alimentación saludable, ingerir agua simple, aguas de sabor, como jamaica o limón endulzadas con algún sustituto de azúcar y no consumir jugos ni refrescos.
Otras opciones para sustituir al ponche tradicional, que contiene mucha azúcar, son los tés, a los que se pueden agregar algunas hierbas como menta o hierbabuena; esto le daría un buen sabor[.]