Cada 15 de febrero se conmemora el Día Internacional Contra el Cáncer Infantil, que tiene como objetivo fundamental crear conciencia y expresar el apoyo en diferentes niveles a aquellos pacientes pediátricos que luchan contra esta enfermedad.
De acuerdo con información de la Organización Panamericana de la Salud, se estima que al menos 2 mil niñas, niños y adolescentes menores de 19 años resultarán afectados por el cáncer anualmente en América Latina y el Caribe. De ellos, cerca de 10 mil fallecerán a causa de esta enfermedad.
Al referirnos al cáncer infantil, es hablar de leucemia linfoblástica aguda (LLA) ya que es la forma más común entre niños y adolescentes y reporta alta incidencia de casos, tan solo en 2022 se registraron más de 5 mil casos nuevos en México. La leucemia es un cáncer de la sangre que afecta a los glóbulos blancos. Estas células se producen en la médula ósea, y cuando se vuelven cancerígenas, crecen y se multiplican sin control.
La recomendación de los expertos es mantenerse atentos a los síntomas de la LLA para poder diagnosticar la enfermedad a tiempo, y así poder tratarla oportunamente, algunos de los síntomas que presenta la LLA son fiebre persistente, sangrado sin explicación, moretones sin causa aparente, manchas rojas en la piel, crecimiento anormal de ganglios en las axilas, cansancio, pérdida del apetito y de peso.
Hoy en día, la leucemia linfoblástica aguda ha cambiado de ser una enfermedad ampliamente mortal a una con la mayor tasa de curación en la hemato-oncología, lo que es más notable en pacientes que viven en países altamente desarrollados, en los que la supervivencia a cinco años llega al 90 %, en contraste con cerca del 70 % en México, que se debe en gran medida a la falta de un diagnóstico temprano.
Existen diferentes factores de riesgo para la leucemia infantil entre los que se encuentran la exposición a niveles altos de radiación, tener determinados síndromes hereditarios, tales como el síndrome de Down y el síndrome de Li-Fraumeni, tener una enfermedad hereditaria que afecta al sistema inmunológico o tener un hermano o hermana con leucemia.
“Es muy importante que, ante cualquier anomalía en la salud de sus hijos, los lleven al pediatra para una revisión. Esto no solo es bueno para que los niños estén sanos, sino que también puede ayudar a detectar enfermedades graves, como la leucemia linfoblástica aguda”, indicó el Dr. Max Saráchaga, director médico de Amgen México.
El tratamiento para esta enfermedad está basado en la quimioterapia, donde puede presentarse una baja en las defensas, así como la presencia de anemia.
Algunos pacientes son candidatos a un trasplante de médula ósea para revertir el daño que haya generado tanto el cáncer, como la terapia para erradicarlo y, finalmente también existen tratamientos innovadores como el anticuerpo acoplador biespecífico de células T (BiTE, por sus siglas en inglés), que actúa para dirigir a las células T del organismo (parte del sistema inmune) para atacar y destruir las células que muestran la proteína CD19, misma que se encuentra en la superficie de las leucemias y linfomas.]
“También algo importante de mencionar es que los altos costos relacionados al tratamiento de la enfermedad tienen un impacto directo en los resultados. Hasta hace poco, en México no se habían realizado estudios sobre el costo de atención de esta enfermedad. Ante esta necesidad en Amgen México financiamos un estudio reciente cuyo objetivo fue establecer los costos de atención institucional en pacientes pediátricos con LLA refractaria o en recaída, mediante la realización de un cuestionario dirigido a hematólogos de instituciones públicas en México. El objetivo del estudio es resaltar la importancia de tratar a los pacientes desde la primera línea con terapias innovadoras – como el anticuerpo acoplador biespecífico de células T – que puedan ayudar a prevenir la recaída y así reducir los costos de los tratamientos“, comentó el Dr. Max Saráchaga, director médico de Amgen México.
Algunos de los resultados del estudio indicaron que en pacientes pediátricos con leucemia linfoblástica aguda resistentes o en recaída (LLA R/R) no respondedores en comparación con el grupo de respondedores reportaron los siguientes costos de atención: costos de rutina $689 817 MXN versus $172 088 MXN; costo del esquema IDA-FLAG (idarubicina más fludarabina, Ara-C o citarabina y factores estimulantes de colonias FEC-G filgrastim) $176 938 MXN vs $208 010 MXN; gasto total anual de $380 099 MXN y de $941 516 MXN respectivamente.
Desde una perspectiva de atención médica enfocada en reducir las recaídas o casos refractarios, deberían considerarse el diagnóstico de la enfermedad mínima residual positiva o persistente (EMR+) desde la primera línea de tratamiento, y el acceso a terapias innovadoras indicadas para negativizar esta EMR+, resultando en una mayor remisión completa y un incremento de la supervivencia libre de progresión y global, es decir, que permitan una mejor respuesta ante la leucemia linfoblástica aguda.
“Nuestra misión, es servir a los pacientes, y estamos comprometidos con la investigación y el desarrollo de nuevas terapias contra el cáncer infantil; continuaremos trabajando arduamente en ofrecer nuevas opciones de tratamiento que mejoren significativamente el pronóstico y la calidad de vida de los pacientes pediátricos con LLA en México y en el mundo.” concluyó el Dr. Saráchaga.