En el marco del Día Mundial de la Salud, cuyo lema para el presente año es la Inocuidad de los alimentos, la Secretaría de Salud señaló la necesidad de vigilar el buen estado de los pescados y mariscos que las familias mexicanas acostumbran en la presente temporada.
Señaló que por sabrosos y nutritivos, los variados frutos del mar son una sana costumbre en la dieta del pueblo mexicano, ya que son una rica fuente de proteínas que cubren las necesidades de nutrición tanto de los niños como de las personas mayores.Sin embargo, los pescados y mariscos pueden ser peligrosos para la salud cuando pierden su inocuidad y se contaminan con virus, bacterias y parásitos, los cuales pueden ocasionar severas infecciones e intoxicaciones.
Es importante que en los hogares se tomen las medidas necesarias al preparar productos del mar, ya que éstos se contaminan a través de microorganismos que están presentes cuando hay falta de higiene durante la manipulación, venta y almacenamiento de los productos.
Los productos más peligrosos son aquellos que se consumen parcialmente cocidos o crudos, como: almejas, camarones, mejillones y ostiones, que se preparan en ceviches o cócteles.
Por ello, recomendó lavar muy bien los productos pesqueros antes de prepararlos, y freírlos o cocerlos para destruir las bacterias y parásitos dañinos para la salud. Asimismo, hizo notar que los frutos del mar no se cuecen con el jugo de limón, ya que las bacterias no se mueren y se debe de evitar el consumo de carne cruda con limón.
Pidió a las amas de casa que al momento de comprarlos, verifiquen que el personal que despacha mantenga los productos en refrigeración o congelados; que el pescado se haya mantenido en camas de hielo, sin rastros de sangre, vísceras, tierra o cualquier materia extraña que pueda contaminarlos. Asimismo cuando compre moluscos, escoja aquellos que tengan la concha firmemente cerrada.
No deben presentar olores desagradables, los ojos y la piel tienen que se brillantes, las escamas no se deben desprendan con facilidad y tienen que estar conservados en refrigeración a una temperatura de 4º Centígrados.