El ácido úrico se deriva del metabolismo de las proteínas en el cuerpo, las cuales forman parte de cualquier alimentación balanceada; sin embargo, el exceso en el consumo de carne puede elevar sus niveles y producir dolor en las articulaciones.

“El síntoma principal de que algo anda mal con los niveles de ácido úrico es el dolor en las articulaciones, pero cuando ya es demasiado, comienza a presentarse un dolor característico en el dedo gordo del pie conocido como ‘gota’. Pero para llegar a este punto ya tuvieron que pasar meses de no hacer caso a los síntomas”, asegura la nutrióloga Lorena Almeida del  Instituto de Nutrición y Salud de Kellogg´s.

“Hay datos que reflejan que es un problema más frecuente en los hombres, por el tema de las hormonas, pero también por los hábitos alimenticios. Muchos varones creen que una comida sin carne, no es comida”.

Además de un problema de malos hábitos alimenticios, ¿a qué se puede deber?

Existen ciertas enfermedades que pueden incrementar el ácido úrico en nuestro cuerpo, muchas de ellas tienen que ver con la formación de células, como es el caso de la leucemia. Por lo tanto, también los niños pueden tener problemas con la producción de esta sustancia, por ejemplo un niño con leucemia va a tener niveles elevados de esta sustancia.

¿Con quién acudir?

El médico general es la primer persona a la que se tiene que visitar en caso de tener dolor en  las articulaciones, y es quien indicará los estudios que se deben llevar a cabo para descartar cualquier otro problemas.

Prevención

Lo primero es disminuir el consumo de carnes rojas. Hay algunos otros alimentos como los mariscos, según comenta Lorena Almeida en exclusiva para Plenilunia, las sardinas, todos los productos derivados de las levaduras, productos horneados, lentejas y frijoles que también contienen ácido úrico.

Sin embargo, hay algunas técnicas culinarias para disminuir la cantidad de ácido úrico en los frijoles: “Lo que pueden hacer es dejarlos remojando unas 24 horas antes de cocinarlos, luego tirar esa agua, después cocerlos y volver a tirar esa agua.

Los caldos también están prohibidos en el caso de problemas con ácido úrico, porque son derivador de hervir la carne. También hay algunas verduras que hay que tratar de evitar: como las espinacas, así como el aguacate”, comenta Lorena Almeida.

Lo que sí hay que consumir:

• Huevo
• Productos lácteos descremados
• Frutas y verduras excepto las que se mencionaron anteriormente.
• Cereales integrales

¡A moverse!

La actividad física también es muy importante, pero se debe de evitar en caso de que haya dolor e inflamación en las articulaciones.

“Tiene que haber un cambio de estilo de vida, en la que el ejercicio sea parte fundamental de los hábitos, pero tiene que ser poco a poco; porque si hay dolor el médico será quien dé la indicación, además de algunos medicamentos que pueden ayudar en el control de ácido úrico”, comenta la especialista.

Lo que tienes que beber

El consumo de agua natural es esencial en cualquier caso. En el tema del ácido úrico es muy importante pues el riñón trabaja demás en el metabolismo de las proteínas, así que un buen consumo ayuda a este órgano.

“La recomendación es de dos litros al día, medida asociada a la recomendación de 2000 calorías al día. Depende de la actividad física que se realice y el lugar donde se encuentre, podrá ser mayor el consumo.

Lo más importante es escuchar a nuestro cuerpo, hacer caso a los síntomas dolorosos. Lo ideal es hacernos un Check Up anual que incluya en análisis de esta sustancia. No olvidemos también tener un consumo moderado de proteínas y que provengan de distintas fuentes, hay que incrementar el consumo de agua, frutas y verduras, así como de ejercicio”, finaliza Lorena Almeida.

Más información en: www.insk.com