Dicen que nadie está conforme con lo que tiene. Mientras algunos odian el pelo delgado por lo frágil que es, otros detestan el frizz del pelo grueso, y es que nuestra cabellera es parte fundamental de nuestra personalidad tanto así, que está la leyenda de Sansón, cuyo don era la fuerza, pero su punto débil era su pelo.
Una de nuestras debilidades y mayores miedos es la caída del cabello, por ello que siempre estamos buscando cómo retrasar o evitar este proceso.
El debilitamiento capilar es un tema que ha sido protagonista de creencias populares entre las que destacan que usar gorra constantemente impide la oxigenación del pelo y, por lo tanto, hace que se caiga o bien, que el cortarlo constantemente hará que te crezca mucho más.
Lo único certero es que existe el pelo delgado y el pelo grueso, cada uno con características únicas que requieren de atención específica para mantenerlo saludable.
Pelo delgado
Antes de entrar en detalle es importante no confundir el pelo delgado con el pelo escaso. El pelo delgado se caracteriza por la falta de volumen, por su fragilidad, sus puntas abiertas y sus enredos constantes, lo que evita que tenga una buena apariencia; de hecho, requiere de una hidratación profunda para darle cuerpo.
Al bañarte, no lo frotes de manera brusca, ya que esto hace que se quiebre con mayor facilidad y cuando vayas a salir de la ducha, recuerda dar una segunda enjuagada para evitar residuos de producto.
Es necesario que utilices champús que además de nutrirlo, lo fortalezcan mientras limpia impurezas y toxinas.
Es importante que busques líneas que contengan ingredientes de alta calidad como extracto de cacahuananche, que hidrata sin maltratar el cabello y que, además, contenga en su formulación extractos como chile, romero, té verde, ortiga y aceite de árbol de té cuya función radica en estimular los folículos del cuero cabelludo. Además, busca aquellos con D- Pantenol, arginina y glicerina para darle un extra de fortalecimiento.
Las mascarillas hidratantes serán tus aliados
Después del champú, es importante que apliques una mascarilla por 5 minutos y que lo hagas con el pelo mojado, de esta manera permitirás que los nutrientes penetren bien en las fibras capilares.
Tus cepillos son importantes
Muchos optan por dejar que el cabello se estilice de forma natural para evitar quebrarlo; sin embargo, si te gusta desenredarlo, utiliza cepillos de cerdas anchas y naturales, así evitarás que tu pelo se rompa y por favor, evita cepillarlo cuando esté mojado, ya que el pelo es más frágil debido al peso del agua.
Pelo grueso
Este grosor es el santo grial de las cabelleras; sin embargo, no es perfecto. Este tipo de pelo tiene folículos más gruesos, por lo que tiende a ser más rebelde a la hora de estilizarlo.
El pelo grueso tiende a desarrollar caspa con facilidad, ya que, al ser abundante, el producto se queda en la piel cabelluda, por lo que es recomendable enjuagar abundantemente y secar con herramientas de calor a temperatura baja, desde luego, aplicando previamente un protector para evitar maltratarlo y disminuir el frizz.
Al cepillarlo, opta por aquellos con cerdas de madera, ya que evitarás el volumen extra y te ayudará a deshacer los nudos con facilidad y sécate con una toalla de microfibra. Así evitarás el apelmazamiento y por lo tanto, facilitarás que la piel cabelluda reciba el oxígeno necesario para darle fuerza.
Con estos consejos de los expertos de Chili&Chili estás listo para cuidar al máximo tu cabellera con una rutina ideal para su grosor.